Las anamorfosis en el arte: La anamorfosis histórica como base de la investigación actual sobre las transformaciones artísticas

Abstract

En el campo de las Bellas Artes, y concretamente de las Artes Visuales, las formas pueden ser distorsionadas en dos aspectos: a) Modificando sus propias estructuras materiales y de proporciones. b) Al ser representadas proyectivamente, sobre un plano u otras superficies varias, con un efecto puramente óptico. En cualquier caso, el juego de las transformaciones y distorsiones constituye la esencia de las Bellas Artes y, con sentido general, es lo que hace el pintor cuando lleva al lienzo o a la pared la imagen de otra realidad física que le sirve de modelo o referencia, produciendo una metamorfosis, con ciertas claves miméticas que las hacen identificables e intercambiables. La Historia del Arte es la historia de estas transformaciones que, en cada época y lugar, incluso en cada artista, han tenido características propias, presentándosenos transformaciones variadísimas de las mismas realidades naturales, que aceptamos como un convencionalismo universal: véase así como, el cuerpo humano, es aceptado como tal en las transformaciones esquemáticas de la pintura paleolítica, en las formas rotundas de Miguel Ángel, en el icono bizantino, en los simbolismos románticos o en los expresionismos de un Noble o un Giacometti, por citar algunas significativas referencias históricas. Pero estas transformaciones, consustanciales al hecho pictórico, no son la base de este trabajo, que ya da por supuesto este tipo de metamorfosis. En este trabajo se parte de esas representaciones y de su universal aceptación para proceder a un segundo tipo de modificaciones, que las convierten en ilegibles y enigmáticas desde el punto de vista habitual, y solo se recomponen, ofreciendo un aspecto normal, cuando el punto de vista lo desplazamos a lugares menos comunes. Este desplazamiento del punto de vista del espectador puede ser de modo directo, o indirecto, cuando usamos la reflexión por imágenes especulares diversas u otros mecanismos de las nuevas tecnologías. Si toda escena o pintura puede percibirse distorsionada al contemplarse desde un punto de vista inadecuado, no entraran en el concepto anamorfosis aquellas formas que en virtud de la experiencia y ciertas leyes de la percepción visual son “corregidas automáticamente”, subsanándose una distorsión que pasa desapercibida al común de los espectadores, por ejemplo, cuando miramos ciertas obras de los maestros (Las Meninas de Velázquez o La Cena de Leonardo), desde una distancia, mayor o menor, más alta o más baja, o en un lugar descentrado del punto principal. Aunque estas visiones inadecuadas producen verdaderas distorsiones anamórficas, la escasa educación visual del espectador medio no las capta, y por ello las desestimamos como fenómenos dignos de tenerse en cuenta, para centrar nuestro estudio en aquellas situaciones extremas que impiden el reconocimiento de la imagen. En determinadas etapas históricas, estudiadas por algunos artistas y tratadistas, se ha profundizado en este fenómeno y se han sacado conclusiones positivas de estas deficiencias perspectivas. Con ayuda de la proyectividad geométrica y con el conocimiento de algunas leyes físicas, se aprovecharán las distorsiones de una deficiente visión para reconstruir las formas, teniendo controladas las deformaciones. Lo que equivale a la posibilidad de distorsiones reversibles cuyo fundamento conocemos. Este es el campo en que nos movemos en esta Tesis: el control de las deformaciones proyectivas y, en consecuencia, su reconstrucción rigurosa. No entran, pues, en este estudio, las deformaciones no reconstruibles o descontroladas, amén de otras deformaciones a las que hacemos breves referencias en distintas ocasiones, como los escorzos, las deformaciones perspectivas, perspectivas aceleradas y ralentizadas, las ilusiones ópticas, el punto de vista inadecuado, etc. En nuestra Tesis damos cabida, además de las deformaciones, también controladas y reversibles realizadas con los modernos medios fotográficos e informáticos, así como sus aplicaciones utilitarias y funcionales, lo que constituye parte de nuestra originalidad aportación en este campo del saber. Por este planteamiento de la cuestión se deduce que, si bien no es un campo totalmente inédito del arte y la percepción, sí es una parcela poco estudiada desde la actual creación artística y sus aplicaciones utilitarias. El investigador y el artista saben de su existencia, pero no han abordado con rigor su estudio y, sobre todo, su metodología, para hacer posible su conocimiento científico, como instrumento actual en muchos de los creadores, al igual que están otros aspectos de la perspectiva cónica, como las sombras o los anáglifos, por ejemplo. Para conseguir este objetivo de claridad y actualización hemos establecido el siguiente orden metodológico: 1. Se recorren los antecedentes históricos, procedemos a un análisis, aplicando a muchos métodos intuitivos o no explicativos con textos los modernos métodos de la proyectividad. 2. Analizaremos el concepto de anamorfosis actual y tratamos de ampliar la concepción anamórfica con otros tipos de deformaciones, bien sea por punto de vista inadecuado u otros tipos de anamorfosis, incluyendo en este estudio nuevos método de realización que se salen del concepto puramente geométrico, incluyendo las leyes de la percepción visual. 3. Hacemos nuestras propias experiencias con las técnicas de los maestros antiguos, y exponemos los resultados. 4. Aportamos nuestros propios métodos teóricos y experimentales, unos como superación de los ya existentes, y otros totalmente originales. 5. Abrimos las posibilidades a la creación con las nuevas tecnologías de la imagen fotográfica y del ordenador, sustituyendo los métodos proyectivos geométricos, de laborioso trazado, por los ópticos e informáticos. 6. Se inicia la aplicación utilitaria en el campo de la comunicación, la publicidad, la señalética, y el diseño gráfico en general, como futuros beneficiarios de estos hallazgos de los artistas y tratadistas del pasado. En resumen, se recopilan las experiencias históricas, se ponen al día con las técnicas actuales y se abre al futuro con nuevas posibilidades utilitarias. Siendo, por todo ello, una Tesis abierta a muchas posibilidades futuras. Creemos que esta Tesis llena un vacío existente en la investigación de las deformaciones controladas, abriendo perspectivas inéditas a los artistas plásticos – manipuladores de las formas – para que puedan construir desde el rigor científico campos poco transitados por la pintura contemporánea, y beber en este manantial lleno de bellezas sorprendentes que las anamorfosis. Aunque se sigue una construcción lineal en la redacción de esta Tesis, puede aparecer, a veces, que quebramos esa línea y nos introducimos en otras cuestiones, paralelas o marginales, pero ello es intencionado y debido a una preocupación pedagógica que sirve para clasificar y depurar el tema central al compararlo con otros, ayudando a precisarlo. Como toda investigación que se plantea con profundidad, nos encontramos con que las cuestiones quedan engarzadas unas a otras, de tal suerte, que aislarlas para su estudio constituye una verdadera mutilación. Pero esa visión parcial que ofrecemos ha sido necesaria, tanto por lo irreducible de un campo tan extenso, como por nuestra incapacidad y limitaciones en otras disciplinas. Así pues, hemos aceptado esta parcelación obligada por tantos condicionamientos como un humilde reconocimiento de nuestras limitaciones. Pero nos queda la satisfacción de dejar una puerta abierta para que futuros investigadores, mejor dotados, avancen por tan original camino del Arte, la Ciencia y la Técnica. CONCLUSIONES 1. Hemos recopilado y ordenado toda la información dispersa a través de la Historia del Arte, la hemos unificado cronológicamente y hemos sacado nuestras propias conclusiones de la evolución que ha tenido desde su nacimiento en el siglo XV hasta nuestros días. A través del análisis realizado podemos concluir diciendo que las anamorfosis han sufrido cambios conforme a los gustos de cada época. En el siglo XV eran los interesados en la geometría de la visión los más allegados a éstas, en el siglo XVII, época de mayor esplendor para éstas, fueron los matemáticos los estudiosos de este arte, siendo por ello un oficio tomando más en serio por los artistas que analizaron y contribuyeron a estos estudios con su obra gráfica. Una vez los matemáticos dejan estos estudios relegados a los artistas, las anamorfosis van perdiendo interés y rigor artístico y se transforman en diversión, para en el siglo XVIII y XIX dar paso a una mayor degradación y transformarse en pasatiempo pornográficos y adornos intranscendentes de habitaciones vulgares. Afortunadamente en el siglo XX, cuando los fenómenos de percepción comienzan un nuevo apogeo y los estudios psicológicos alcanzan un interés pronunciado, salen a la luz de nuevo las anamorfosis para entrar en un campo hasta ahora no estudiado y con visos de superación entrando de lleno en el problema de la comunicación para manifestar visiones poco claras dentro del campo del señalética y la publicidad. 2. Hemos clasificado este campo al distinguir, dentro de las múltiples deformaciones, cuales son las auténticas anamorfosis, separándolas de los escorzos, proyecciones geométricas, distorsiones representativas, ilusiones de trompe l’oeil, etc., acotando con precisión el concepto de anamorfosis en el arte. 3. Hacemos aportaciones parciales como se indica en cada apartado anterior, que revistan carácter inédito en la bibliografía conocida. 4. Realizamos mediante leyes geométricas métodos proyectivos de más fácil comprensión y análisis que los aportados hasta ahora por los antiguos tratadistas. Llegando a la conclusión de que un mismo método proyectivo, diferente para las ópticas y para las catóptricas, con leves variaciones, es válido para cualquier tipo de anamorfosis de un tipo u otro. 5. Elaboramos instrumentos, basados en los experimentos y grabados de siglos anteriores, para realizar anamorfosis sin geometría previa. Llegamos a la resolución de que el resultado no varía, con o sin geometría, por tanto siendo reversible podemos decir que el fin justifica los medios. 6. Aportamos los principios de la percepción visual en competencia con los proyectivos geométricos para alcanzar mayor eficacia en las experiencias. 7. Introducimos los métodos fotográficos e informáticos como un nuevo campo en la metodología y tratamiento de las anamorfosis.