Abstract | La vivencia de un trauma, en cualquiera de sus manifestaciones (abuso infantil, violencia familiar, etc.) supone una experiencia devastadora para la víctima, cuya vida se ve estigmatizada para siempre, dependiendo el proceso ...
La vivencia de un trauma, en cualquiera de sus manifestaciones (abuso infantil, violencia familiar, etc.) supone una experiencia devastadora para la víctima, cuya vida se ve estigmatizada para siempre, dependiendo el proceso de recuperación de los propios recursos cognitivo afectivo-motivacionales y conductuales que aquélla posea, así como del grado, alcance y profundidad de las secuelas físicas, sexuales y psicológicas ocasionadas, acerca de todo lo cual se reflexiona en el presente trabajo.
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