Centro de recepción de visitantes de Itálica, reactivación de las ruinas romanas de Itálica, Sevilla

Abstract

El conocimiento y el análisis realizado del lugar y su contexto serán las herramientas claves para el desarrollo del proyecto de actuación, ya que nos cuenta cómo debemos actuar, nos lleva hacia una interpretación del problema y desemboca en una estrategia de intervención, consciente de lo existente y que permite añadir un capítulo más a la historia del conjunto. Nos encontramos ante un proyecto de lo más interesante en el que su principal función es la de dotar al conjunto arqueológico de Itálica de un nuevo punto de atracción, información y difusión pero sin restarle importancia a las ruinas. El lugar seleccionado para la intervención esta fuertemente marcado por las condiciones morfológicas del terreno y los restos arqueológicos hallados en su proximidad e incluso en su interior. Esta calle, actualmente llamada Feria, parecía ser un eje importante en su día ya que aparentemente conectaba casi de manera directa el puerto con el Traineum, en la actualidad es el límite bastante difuso entre la antigua ciudad y la nueva, por eso bajo mi criterio me parecía el sitio idóneo para la ubicación de esta nueva pieza que conectará todo. En cuanto al proyecto, desde el inicio mi mayor preocupación era la de conseguir recuperar la interacción entre los elementos separados mediante la reactivación del lugar, eso me llevo a proyectar una pieza longitudinal que pudiera crear unas vistas tanto del teatro como del conjunto arqueológico principal, como idea fundamental del proyecto me apoyo en una de las tareas más habituales de los arqueólogos como es la realización de catas en el terreno en busca de posibles hallazgos, en mi caso el terreno a manipular es la colina existente y mediante estas “catas” controladas surgirán tanto nuevas ruinas y como los diferentes espacios que configuran el complejo. Se diseña un programa funcional donde cada actividad abarca el papel de gestor y técnico, la capacidad de enseñar y producir, se intenta desarrollar un programa que consiga ser autosuficiente y además, volcarse a la ciudad, por ellos no existe una jerarquía de usos, ni horarios establecidos, toda actividad es complementaria y en su conjunto permiten el buen funcionamiento del edificio. La hipótesis del hallazgo de ruinas nuevas por esas “catas“ me permite crea dos puntos fuertes en la intervención, unos de ellos será la muralla la cual planteo su reconstrucción dándome la posibilidad de crear un mirador en la parte alta de la colina con una panorámica privilegiada sobre el conjunto de Itálica y que se a su vez se conecta con el mirador existente, proyectado por el arquitecto Francisco Reina, sobre el teatro, haciendo que el límite de la ciudad antigua este marcado por algo más que una simple calle, es decir, que dicha muralla junto con el edificio propuesto funcionan de filtro entre las dos ciudades. El otro punto en el que me apoyo para el desarrollo del proyecto es en una excavación que ya se ha realizado en uno de los solares de la zona y coge bastante importancia al volcar la pieza angular del proyecto, la sala de exposiciones, sobre ella y poder observar dichas ruinas desde diferentes puntos de vista, algo a lo que no estamos acostumbrados. El programa del proyecto propuesto desde el principio consta de una zona de recepción para los visitantes acompañada de una pequeña tienda y una cafetería, otra zona de docencia y difusión y por ultimo la zona de exposición.