dc.description.abstract | Resumen
Introducción: El Accidente Cerebrovascular es una de las principales causas de
discapacidad, con una incidencia en España de más de 120-350 casos nuevos por cada
100000 habitantes/año, siendo mayor la probabilidad a partir de los 75 años.
Actualmente, es un problema de salud pública que ha incrementado los problemas
crónicos en las personas afectadas y el gasto público. Estas secuelas presentan
diferentes características dependiendo de factores biológicos (como el sexo o la edad) y
factores clínicos y demográficos, de carácter externo. En conjunto, estos factores
determinan distintos niveles de participación social que pueden ser identificados y
valorados por la Clasificación Internacional del Funcionamiento (CIF), existiendo
antecedentes de su uso para establecer, además, criterios diagnósticos en Fisioterapia.
Objetivos: En primer lugar, definir la muestra en términos del nivel de
participación percibido en un año de seguimiento; en segundo lugar, describir y
analizar el nivel de participación percibido por los participantes, en función a las
variables sociodemográficas y clínicas del estudio; y, por último, clasificar los ítems del
nivel de participación en personas tras ictus, en función de ser o no dependiente por la
puntuación de la Medida de Independencia Funcional.
Metodología: Se llevó a cabo un estudio descriptivo, longitudinal y prospectivo
de seguimiento de una cohorte en una muestra de n=45, compuesta por hombres
(66,7%) y mujeres, con una edad media en hombres de 71,4(6,82) y en mujeres
68,53(15,96), pertenecientes a una Asociación de Enfermos Cerebrovasculares
andaluza. Se realizaron valoraciones basadas en los ítems de la participación de la CIF
en cuatro momentos cada 60 días, excepto el último realizado al año del primero. Se
hicieron análisis descriptivos y de asociación cruzada, tras comprobar la normalidad de
la muestra.
Resultados: Se obtuvieron cambios significativos (p<0,05) en un año de
seguimiento para los ítems sobre la capacidad de cambiar posturas, vestirse y uso de
cubiertos, con la descripción de una mayor percepción del nivel de participación en los
participantes en general. Los ítems sin la ayuda habitual no reflejaron cambios en
función a las variables sociodemográficas y clínicas sobre la muestra general.
Por diferencias según las variables sociodemográficas, se obtuvieron diferencias
significativas entre grupos de estas para: en función al sexo, existen diferencias
significativas entre ambos grupos (p<0,05) en las capacidades de movilidad del brazo,
peinarse/afeitarse, autonomía, ocio y la participación en obras sociales, mostrando un
nivel de participación percibido mayor en los hombres, excepto para la capacidad de ser
autónomo. Respecto al tiempo transcurrido, se describieron que el mayor nivel de
participación percibido, con una diferencia significativa, se daba entre los participantes
con menor tiempo transcurrido para los ítems de movilidad. Asimismo, entre los dos
grupos de las variables edad y limitación funcional, se rechazó la hipótesis nula (H0) y
se describieron diferencias significativas en las capacidades de la dimensión movilidad
para las transferencias y caminar largas distancias. En función a la presencia o no de
algún tipo de disfunción musculoesquelética y del uso de ayudas, con niveles de
participación peores para los que sí presentaban este problema y usaban ayudas
ortopédicas, y con mayores diferencias entre ítems de la movilidad. Estas similitudes se
corresponden con la relación estadística (p<0,05) entre las variables limitación
funcional y disfunción musculoesquelética, y entre esta con el uso de ayudas. Para las
variables, tipo de diagnóstico y afectación corporal, las diferencias demostradas entre
grupos han sido para los ítems de movilidad y autocuidado, con niveles de participación
más reducidos entre los participantes con lesión neurológica y con afectación del lado
izquierdo. Las diferencias por situación de residencia y asistencia en domicilio, se
dieron entre los ítems de las tres dimensiones, con mayores niveles de participación y
cambios de mejora en un año de seguimiento entre los participantes que viven
acompañados y sin asistencia en el domicilio. En función a la motivación, los datos
mostraron que las mayores diferencias en el nivel de participación estaban en los ítems
no adaptado, con peor nivel percibido en el grupo de recuperación frente a los de
mantenimiento.
Respecto a la distribución del nivel de participación en función de la
dependencia o no por la FIM, el 53% de los participantes eran independientes, con una
distribución de respuestas del nivel de participación de mayor capacidad respecto al
grupo de dependientes, descrito en las tres dimensiones de la participación. Los
resultados de los ítems sin la ayuda habitual tenían poca participación de respuestas, en
especial en la dimensión de vida comunitaria.
TESIS DOCTORAL: Fisioterapia y uso de la Clasificación Internacional del
Funcionamiento, de la Discapacidad y de la Salud: estudio exploratorio de la
participación social tras ictus.
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Conclusiones: Las personas tras ictus sufren alteración del nivel de
participación, integrado por: movilidad, autocuidado y vida comunitaria, y que se refleja
por los cambios en un año de seguimiento. La edad avanzada, el mayor tiempo
transcurrido y la presencia de disfunción musculoesquelética son factores negativos en
los resultados de la percepción del nivel de movilidad. Al igual que las variables
relacionadas, presencia de disfunción musculoesquelética y presencia de limitación
funcional en la evidencia de peor nivel de participación en la movilidad y autocuidado.
Según la variable sexo, los hombres tienen una percepción mayor de su nivel de
participación en los ítems del autocuidado y de la vida comunitaria. Además del mayor
nivel de participación descrito, en función al grupo de participantes que vivían
acompañados respecto a los que referían vivir solos. El resto de variables como el
diagnóstico de ingreso en la asociación, el tipo de afectación corporal, asistencia en
domicilio, uso de ayudas y motivación, no demostraron cambios concluyentes para
entender el nivel de participación. La distribución del nivel de participación en función
al grado de dependencia establecido por la FIM, indica que los participantes
independientes presentan un nivel de participación percibido de menor o nula dificultad
respecto a los participantes dependientes.
Relevancia para la profesión y la práctica clínica: El estudio de la
Clasificación Internacional del Funcionamiento desde la Fisioterapia puede llegar a
aportar a la profesión mayor autonomía en cuanto a la valoración de los pacientes, pues
se trata de un marco teórico que sienta las bases en el funcionamiento y la movilidad
como punto central de estudio y aporta una visión de la disfunción más positiva, desde
el prisma de la capacidad y no de la limitación. El ictus presenta numerosas secuelas
que atentan contra la funcionalidad de la persona y esto tiene consecuencias a nivel
social que deben ser tenidas en cuenta por los fisioterapeutas, cuya función es muy
reconocida en el tratamiento de estas personas. El hecho de definir patrones del nivel de
participación en función a variantes demográficas y clínicas, facilita esbozar un patrón
con facilitadores y barreras fácilmente reconocibles en los pacientes tras ictus que
acuden a los servicios de Fisioterapia. | |