El consejo farmacéutico en el tratamiento del envejecimiento cutáneo

Abstract

El envejecimiento cutáneo es un proceso fisiológico inevitable en nuestro organismo. Tantos factores intrínsecos como factores extrínsecos, especialmente la exposición a la radiación ultravioleta, contribuyen a la aparición de los signos del envejecimiento cutáneo. Estos factores dan lugar a cambios histológicos en las distintas capas de la piel resultando en los signos visibles característicos de una piel envejecida como las arrugas, falta de firmeza y elasticidad, sequedad cutánea e hiperpigmentaciones. La gran mayoría de la población busca minimizar los signos del envejecimiento buscando una apariencia joven, y el papel del farmacéutico desde la oficina de farmacia es fundamental en el asesoramiento de su tratamiento. Para tratar el envejecimiento de la piel es imprescindible el uso de protectores solares, junto a la aplicación tópica de compuestos activos y mantener buenos hábitos saludables. Dentro de los compuestos activos que se recomienda aplicar sobre la piel, se encuentran antioxidantes, despigmentantes, regeneradores de los componentes estructurales de la piel, y compuestos con actividad inhibidora de la neurotransmisión muscular.