Abstract | La autofagia juega un importante rol en el mantenimiento y la supervivencia celular, ya que es
un proceso catabólico de degradación celular que permite el reciclaje de los componentes
celulares para mantener la homeostasis ...
La autofagia juega un importante rol en el mantenimiento y la supervivencia celular, ya que es
un proceso catabólico de degradación celular que permite el reciclaje de los componentes
celulares para mantener la homeostasis celular. Amplios estudios han demostrado que hay una
gran cantidad de genes y moléculas implicados en este proceso, y se ha visto el papel tan
importante que juegan las moléculas mTOR y AMPK en la regulación de este proceso. Una
desregularización en el proceso de la autofagia se relaciona con enfermedades
neurodegenerativas, como la enfermedad de Alzheimer (EA), entre otras. En la EA se ha
demostrado que la actividad de la autofagia está disminuida, provocando la acumulación de
vesículas autofágicas en neuronas.
La proteína quinasa activada por AMP (AMPK) tiene funciones críticas en la regulación del
crecimiento, y recientemente se ha relacionado con procesos celulares como la autofagia. La
autofagia es promovida por la AMPK, un sensor de energía clave que regula el metabolismo
celular para mantener la homeostasis energética en situaciones de deficiencia de ATP. Su
activación produce un aumento de la autofagia en neuronas, por lo que se ha demostrado que
mejora los síntomas de la demencia. Por el contrario, la autofagia es inhibida por la diana de la
rapamicina en los mamíferos (mTOR), la cual está formada por un conjunto de proteínas que se
encargan de controlar procesos anabólicos del organismo como la síntesis de proteínas. Un
exceso de activación de mTOR puede llevar a enfermedades como EA.
En esta revisión bibliográfica se resumen los términos generales que engloban al proceso de la
autofagia, sus etapas, así como los métodos de detección más característicos y nos adentramos
en la señalización y regulación que se lleva a cabo en este proceso a través de sus moléculas más
destacables mTOR y AMPK.
|