El lenguaje poético de los materiales. Arte povera y arquitectura.

Abstract

El presente trabajo trata sobre las relaciones del Arte, en concreto el Arte Povera, con la Arquitectura y la capacidad que pueden tener los materiales empleados para generar ideas, transmitir conceptos y emocionar a partir de su lenguaje poético. El calificativo “povera” surge como antidefinición, para escapar del “sistema”, casi como condición nómada de la creación y alude a su cualidad de un arte tecnológicamente pobre, en un mundo tecnológicamente rico. El término pobre se refiere a la exploración por parte del movimiento de una amplia gama de materiales más allá de los tradicionales.Para escapar al sistema, plantea una estrategia fundamental: el paso a la acción povera. El término “povera” viene condicionado por el uso de materiales humildes y pobres, generalmente no industriales. Han encontrado paralelismos culturales en experiencias como las del teatro “pobre” y han tratado de restablecer las relaciones arte-vida mediante un proceso de desculturalización de la imagen, de reinstaurar la unidad del hombre más allá del sistema consumista y tecnológico. Sus propuestas, en apariencia descuidadamente realizadas, se convierten en provocadora llamada a la reflexión y a la adopción de una postura crítica. El Arte Povera abandona la reconstitución de objeto y responde a una colección heterogénea de sustancias y formas del campo visual. Con frecuencia se asemeja a un montón de desperdicios. La heterogeneidad de los materiales remite sobre todo a las formas o estados de transformación que pueden alcanzar A lo largo de la historia , se puede observar que las vanguardias artísticas siempre van por delante de la arquitectura de cada momento y al igual que el Arte Minimal norteamericano, de la década de los sesenta y setenta de mil novecientos, influyó considerablemente en arquitecturas posteriores, hubo otro movimiento artístico coetáneo, europeo – más concretamente inicialmente focalizado en Italia- que fue denominado Arte Povera, que surgió como contraposición al Minimal Art, cuyos conceptos y espírituha tenido una influencia fundamental en muchas arquitecturas, especialmente en algunos arquitectos de gran relevancia en el panorama arquitectónico actual. Se han estudiado los manifiestos teóricos del Arte Povera, fundamentalmente los elaborados por Germano Celant, principal teórico del movimiento, en “Apuntes para una Guerrilla”, así como la obra y escritos de sus principales integrantes, especialmente de aquellos que consideramos han tenido una mayor aportación para la arquitectura. Se analiza su definición, características, nacimiento, contexto histórico, social, político y artístico. Los antecedentes y precursores. El significado término povera y lo que significa el “espíritu povera”. También se estudia su vertiente japonesa, también coetánea, llamada “La Escuela De Las Cosas” (Mono-Ha), así como su contraposición con el Arte Minimal, pues “lo que ves no es lo que ves”, lo que ves te lleva a un viaje a través de todas las referencias que se desprenden de la obra, referencias simbólicas, antropológicas, míticas. El Minimal Art, se relaciona con el cuerpo y el movimiento, pero los artistas povera están más cerca de esos doce sentidos que necesita Joseph Beuys para orientarse en su obra: ya no sólo el gusto, el olfato, el tacto, el olor y la vista, sino el sentido térmico, el sentido del movimiento, el sentido del equilibrio, el del dolor, el del espacio, el del tiempo, el de la vitalidad. El Arte Povera juega con una experiencia vivida que puede retardarse cuanto quiera en el juego de evocaciones que le vayan suscitando las obras. Bajo el prisma del Arte Povera, se investiga sobre ciertos conceptos como pueden ser la dualidad, las contraposiciones o confrontaciones, el proceso, la energía, las relaciones entre aturalezacultura- técnica, la ecología, la poética, el binomio arte / vida, el espacio o el hombre. Se analiza el concepto de “materia” y materiales en el Arte Povera, y las influencias y contaminaciones entre éste y la arquitectura. En paralelo se recoge lo que puede haber de “povera” en determinadas arquitecturas y se han elegido una serie de arquitectos, cuyas obras en conjunto -o alguna especialmente significativa- ha sido generada y construida guiada por lo que podríamos denominar “espíritu povera”. Se recogen las manifestaciones concretas de muchos de ellos sobre su interés por el Arte Povera o por alguno de los integrantes del grupo. Los arquitectos son fundamentalmente nueve: Lina Bo Bardi: contextualización total para una arquitectura universal. Frank Gehry: materiales descontextualizados de lógicas culturales, de producción y consumo. Herzog & De Meuron: por la materia a la inmaterialidad. Valerio Olgiati: arquitectura codificada, incertidumbre y contradicción. Peter Zumthor: la poética de los materiales. Lacaton & Vassal: actitud espontánea frescura con la belleza de lo necesario. Gordon Matta Clack: manipulación poética del espacio. Antón Garcia-Abril: energía en la autenticidad y el uso descarnado de los materiales. Antonio Jimenez Torrecillas: paisaje, materiales y luz. Estudiamos la influencia del Arte Povera, en sus proyectos, con el uso de materiales ordinarios, convencionales, banales, que no requieren grandes procesos de transformación; elementos hechos en fábrica listos para usar. Aquí podemos establecer paralelismos con la arquitectura, no sólo con la aproximación fenomenológica, sino también por el uso del material tal cual, con sus cualidades poéticas. Analizando la relación entre realismo y abstracción desde otra perspectiva, ya que en la arquitectura actual parece haber más interés por la piel del edificio que por su secuencia espacial, la función o la estructura, temas candentes de la arquitectura, que no es que ya no tengan importancia, sino que han pasado a un segundo plano. Estas relaciones e influencias que tratamos no competen a algo meramente formal o estético sino que, sobrepasando esos planos, afectan a lo más profundo de la arquitectura, incidiendo fundamentalmente en su profundo, y con frecuencia olvidado, sentido social y ético. Termina con una serie de reflexiones sobre la presencia de ideas en la materia construida, y cómo ésta contribuye a concebir arquitectura, ya que paradójicamente constatamos que sólo hay ideas en las cosas. Abordamos los elementos de materia y materiales,-teóricos en determinados arquitectos y plasmados en algunas arquitecturas contemporáneas- y su nuevo sentido a la luz de este movimiento conceptual y se finaliza analizando la vigencia del Arte Povera en el último capítulo, y como obra abierta que pretende ser, lleva por título otro dilema: concluir o comenzar.