Efecto de la radiación gamma sobre las emigraciones celulares en el mesencéfalo y sobre la formación de rosetas en el embrión del pollo

Abstract

En el capítulo anterior, veíamos como varios autores hacían referencia emigraciones celulares en distintas partes del S.N.C. en fases de morfogénesis y desarrollo embrionario. Pero a pesar de haber sido observadas, ningún autor ha demostrado el mecanismo por el cual estas emigraciones tienen lugar, siendo hasta el momento desconocidos los factores que impulsan a los neuroblastos a emigrar hacia el lado opuesto a través de la línea media. Se ha pensado en la posibilidad de una emigración por quimiotaxis o neuroquimiotaxis, por proteínas constituirían estructuras fibrilares las cuales a modo de guía tirarían de las células, o bien servirían de rieles por entre las que se desplazarían. Otros autores con razonamientos más simplistas creen que las células se desplazan a través de formaciones anatómicas que por su disposición resultan favorables para el desplazamiento. Es posible, piensan otros, que las células emigran hacia el lado opuesto buscando receptores específicos en las formaciones celulares del lado opuesto. En el presente trabajo, a pesar del efecto inespecífico de la radiación, nos proponemos interferir tales emigraciones con la acción de la radiación gamma. Si la causa de la emigración es orgánico-estructural, al ser destruida por la radiación, esta no se debe producir o al menos se detendrá caso de que ya esté iniciada. Por el contrario si a pesar de la irradiación las emigraciones siguen teniendo lugar, es lógico pensar por analogía con el anterior razonamiento, que la causa no es orgánico-estructural sino bioquímica. Tendría lugar pues un desplazamiento desordenado y anormal en cuanto a la dirección que tomen las células. Si la emigración fue producida por factores químicos, hemos de aceptar que el efecto radioquímico tendría efectividad caso de poder actuar sobre proteínas o estructuras fibrilares proteicas o cualquier otro tipo de macromolécula. Desafortunadamente el efecto radioquímico, a través del efecto indirecto de la radiación, es pequeño, siendo necesario para que esta sea apreciable dosis muy altas de radiación, lo cual produciría una gran mortalidad celular y por consiguiente la imposibilidad de apreciar el fenómeno de las emigraciones e incluso la imposibilidad de su inicio. Las dosis fundamentalmente estudiadas por nosotros son de 1.000 R y 1.500 R.. Respecto a la formación de rosetas celulares en el Sistema Nervioso Central y retina del embrión de pollo por medio de la radiación gamma, hemos de admitir que los estudios que dan cuenta sobre su formación son muy numerosos. Pero, si bien como veíamos en el anterior capítulo muchos autores denuncian su existencia, pocos son los que da una explicación del proceso íntimo de formación de las mismas y de las causas primeras que inducen a su formación. Por medio de la radiación gamman nos proponemos además de corroborar su formación, dar una explicación del proceso de formación y de las posibles causas primeras que lo inducen. La dosis óptima para su estudio es la comprendida entre 1.000 R y 1.500 R. Según se aprecia en estudios realizados previamente por nosotros a dosis inferiores (100 y 500R.), la formación de rosetas deficiente y poco clara. Posteriormente hemos confirmado estas dosis con las utilizadas por MORATO y CORREIA para la consecución de rosetas por medio de radiación gamma.