2016-03-302016-03-302009978-84-692-5715-9http://hdl.handle.net/11441/39168La mujer está protagonizando un cambio profundo, esencial, en el entendimiento de la disciplina arquitectónica. Su incorporación masiva a la vida laboral y al ámbito público en los últimos años ha supuesto un cambio radical en la concepción de la vida cotidiana que, sin embargo, las ciudades y los espacios en los que habitamos no están preparados para asumir. Adaptarse a las nuevas demandas de la sociedad requiere una revisión constante y nueva de los criterios habituales aplicados al diseño de la vivienda y a la definición de espacios de encuentro entre lo público y lo privado que faciliten la conciliación de la vida laboral, familiar y de ocio. Desde el ámbito de la universidad es necesario que el alumno explore, a partir de una observación crítica, la escena social contemporánea que le rodea. Es preciso traer a las aulas la discusión sobre estos temas con el objetivo de formar a profesionales con capacidad de proponer desde la arquitectura, en todo su amplio espectro de posibilidades de actuación –programas, organizaciones sociales, soluciones urbanas, propuestas arquitectónicas…-, respuestas concretas que asuman el compromiso de conectar con las personas y hacer frente a estos problemas complejos de la realidad.application/pdfspaAttribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 Internacionalhttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/InvestigaciónGéneroArquitecturaUrbanismoDocenciaArquitectas, un reto en el ámbito profesional y docenteinfo:eu-repo/semantics/conferenceObjectinfo:eu-repo/semantics/openAccesshttps://idus.us.es/xmlui/handle/11441/39168