Lozano-Gómez, MaríaQuesada-García, SantiagoBuzón García, Olga2024-11-262024-11-262024-11-15978-84-1177- 060-6https://hdl.handle.net/11441/164958La revolución digital impulsada por las nuevas tecnologías está cambiando la manera en la que las personas se relacionan con los entornos habitacionales. Hoy en día el espacio de la educación ya no está ubicado solo en el aula, hay muchos y diferentes lugares, incluyendo los domésticos, que pueden ser concebidos como ámbitos de aprendizaje. Por otro lado, hay que tener en cuenta que el perfil actual del aprendiz es muy diverso, ya que ahora no abarca solo a una población de edad temprana. Las personas de la tercera edad, por ejemplo, componen un colectivo social, muy amplio y variado, que presenta dificultades en la aprehensión de las nuevas tecnologías, lo que requiere un renovado esfuerzo de aprendizaje. Además, una parte de esta población son personas con diversidad cognitiva, como los afectados por la enfermedad de alzhéimer (EA), un colectivo en crecimiento constante. Estas son personas que tienen una demanda de aprendizaje continuado, ya que necesitan re-aprender procesos cotidianos para llevar a cabo sus actividades instrumentales de la vida diaria. Es necesario que los nuevos espacios educacionales, así como las herramientas y recursos del proceso de formación, sean accesibles e inclusivos para todos. En este nuevo panorama, la inteligencia artificial (IA) se presenta como una innovadora herramienta útil para la formación de este grupo poblacional que les permita seguir realizando con normalidad sus actividades cotidianas, con autonomía y calidad de vida. A traves de chatbots y voicebots que interactúan con los usuarios, algunas soluciones de IA, muestran su potencial cuando esta tecnología se implementa en la arquitectura, ya que consiente que el entorno habitacional se convierta en un elemento protésico externo, una especie de ‘exo-cerebro’ que, en ocasiones, puede suplir determinadas carencias cognitivas. Esta comunicación aborda, desde un enfoque disciplinar de la Neuroarquitectura, cómo la IA puede integrarse en los entornos habitacionales y configurarse como un recurso educativo accesible para personas con diversidad cognitiva. La metodología del trabajo incorpora una revisión exhaustiva de la bibliografía reciente sobre aplicaciones de IA destinadas al diseño del espacio formativo desde un punto de vista arquitectónico. Un punto de partida básico para sistematizar, ordenar y validar la cantidad de programas que han surgido durante el último año. Los resultados que se presentan en esta comunicación son parte de los avances alcanzados en el proyecto nacional competitivo I+D+i: ALZARQ (PID2020-115790RB-I00). Como conclusión provisional se puede afirmar que, en un futuro inmediato, la IA será un elemento esencial para incorporar en el diseño y construcción de innovadores espacios educacionales. Además, estos ambientes tendrán la capacidad de convertirse en asistentes de habitantes con carencias cognitivas con soluciones que, posteriormente, serán extrapolables al resto de la sociedad. La arquitectura cuenta con los recursos técnicos y compositivos para, a través de esta tecnología emergente, construir un ‘exo-cerebro’ capaz de interactuar, de manera pro-activa, con los usuarios, mejorando así su aprendizaje diario y contribuyendo a su bienestar general. Mostrar cómo es posible hacerlo es el objetivo principal de este trabajo.application/pdfspaEnvejecimientoInteligencia ArtificalAlzheimerDeterioro cognitivoArquitecturaProyecto arquitectónicoNeuroarquitecturaDiversidad cognitivaNeuroarquitectura aplicada al diseño de entornos educacionales accesibles para todos: IA y nuevas tecnologíasinfo:eu-repo/semantics/conferenceObjectinfo:eu-repo/semantics/openAccess