Bioquímica Médica y Biología Molecular e Inmunología
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Tesis Doctoral Estudio del comportamiento electrocardiográfico de los iones alcalinos monovalentes en el infarto de miocardio experimental(1965-11-09) Bellido Gámez, Juan Antonio; Viña Giner, José María; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaEs un hecho bien conocido desde un punto de vista clínico, que determinados sujetos afectos de severos infartos de miocardio, demostrados por la clínica y los análisis consecuentes e incluso en determinados casos por la necropsia, no presentan manifestaciones de actividad eléctrica anormal en los trazados derivados al efecto. Se ha pensado en la posibilidad de que estos infartos por su localización en la cara posterior del corazón, o por ser pequeños en extensión y no aflorar a la superficie del epicardio o del endocardio, sería n la causa de esta ausencia de signos electrocardiográficos. Se han utilizado derivaciones especiales para el diagnóstico de estos infartos, (Hula), algunas como las intraesofágicas han llegado a generalizarse, pero aunque han disminuido las discordancias existentes entre la clínica y la electrocardiogragía, aún existen casos, relativamente frecuentes en que no aparece manifestación electrocardiográfica alguna que nos induzca a pensar en la existencia de una necrosis muscular cardiaca. Esto ha conllevado a la valoración diagnóstica de determinadas pruebas de laboratorio, entre las más utilizadas las transaminasas glutámico oxalcético, glutámico pirúvica, leucocitosis y aumento de la velocidad de sedimentación. (Angelino, Mina, Doskov, Oreskov y Dimitrov.) Por otro lado, nos encontramos con excesiva frecuencia, manifestaciones electrocardiográficas que nos hacen sospechar la posibilidad de lesiones necróticas miocárdicas, sin observar manifestaciones clínicas ni de laboratorio típicas de los mismos. Son muchos los trabajos que se han publicado intentando aclarar esta discrepancia, (Prescott, Dumont, Presniakov) incluso algunos autores han relacionado la existencia o no de estas manifestaciones con la rapidez de creación de circulaciones colaterales. (Blumgart, Schlessinger) o con la patocronia del infarto (Heinecker). Estas discordancias han creado un clima de reserva diagnóstica en los trazados electrocardiográficos, que algunos autores han intentado revalorizar mediante revisiones de conjunto del problema que estamos tratando (Grewin, Nakano). Todo lo anteriormente expuesto nos indujo a aclarar las razones por las cuales aparecieron los trazados denunciadores de sufrimiento o necrosis, provocando experimentalmente infartos de corazón y verificando derivaciones directamente desde la zona sana y la zona infartada del miocardio. Preveíamos que procediendo así podríamos efectuar un análisis más correcto del problema, al eliminar una serie de incógnitas que evidentemente juegan un papel cuando se deriva desde la superficie del precordio en el tórax. Este método tiene la ventaja de que se eliminan en la experiencia todos aquellos factores que están relacionados con la conducción inespecífica o la conducción de volumen, que son las masas de tejidos que se interponen entre el elemento creador del potencial corazón, y la placa de mental que sirve para derivarlo, extremidad precordial del cable del electrocardiógrafo. La eliminación en consecuencia de las incógnitas o factores de error antes señalados nos conduciría a resultados cuyo análisis sería más fácil de verificar, toda vez que podrían estar en conexión con hechos perfectamente delimitados y modificables por la voluntad del experimentador. Por otro lado, la puesta a punto de un método experimental como el que nos proponemos realizar, permitirá efectuar en distintos animales experiencias que fuesen rigurosamente superponibles, al objeto de que los resultados fuesen comparables, ya que pequeñas variaciones en el planteamiento de una experiencia de este tipo conlleva alteraciones en los resultados que serían difíciles de sistematizar. El método experimental en el que se apoya el presente trabajo tiene su punto de partida en las experiencias de Wilson y Hill, que en los años 1934-35 efectuaron ligaduras de la coronaria descendente anterior observando las manifestaciones electrocardiográficas producidas por la misma. Johston y Hill, repitieron las experiencias pero centrando su estudio sobre las manifestaciones electrocardiográficas precoces de la ligadura de la misma arteria. Otros autores (Schlessinger) estudian las anastomosis interarteriales postoclusivas de las arterias coronarias. Los efectos electrocardiográficos de la oclusión intermitente o temporal de las coronarias fueron estudiados por Blumgart, Mathew y Levy estudian el efecto sobre el flujo de sangre de la ligadura de una arteria coronaria. En general todos estos autores mencionados utilizaron la técnica de disección de la arteria coronaria descendente anterior, y con menos frecuencia la circunfleja, y oclusión posterior mediante ligadura o clampaje de las mencionadas arterias coronarias. En años posteriores las técnicas de producción experimental de infartos de miocardio han venido evolucionando a medida que ha mejorado el material y la técnica quirúrgica. Entre los métodos experimentales más comúnmente empleados están la inyección intracoronaria de sustancias de elevado peso molecular (Toyomisano et al.), polvo de licopido por ejemplo utilizado por James y West. La producción de trombosis intravascular mediante una descarga eléctrica producida por un catéter metálico introducido en una arteria coronaria por sondaje bajo control radioscópico, Sawyer y Pate. También se han conseguido infartos de miocardio, en especial por autores rusos, con la administración por vía oral de determinadas sustancias favorecedoras de procesos degenerativos vasculares. El trabajo prínceps lo público Myasnikov y basados en este los de Kostiw, Xhecuckuk y Brezniths, Mortaria ha obtenido infartos de miocardio en pequeños animales con el isoproterenol. A pesar de todos los perfeccionamientos técnicos actuales los autores siguen prefiriendo la técnica inicial de disección y ligadura de la arteria coronaria descendente anterior para obtener infartos de miocardio experimentales. Pisa, Hammer, Purandare, Durandare, Jennings, Sommers, Smith, Flack y Linn. Con esta preparación estrictamente teórica, probablemente no hubiésemos conseguido una depurada técnica a no ser por la visita que a este Laboratorio de Fisiología realizó el Doctor Sodi Pallares durante el primer trimestre del curso 1963-64. El cual nos hizo una demostración en el quirófano experimental de la técnica de disección de la arteria coronaria, y de la producción experimental de bloqueos de ramas. Técnica que más tarde hubimos de modificar por las razones que se exponen en el apartado de material y método de esta Tesis Doctoral. El inconveniente difícil de obviar cuando se verifica un trabajo por muy amplio que sea, de carácter electrocardiográfico sobre hombre enfermo, radica en el hecho de que la actitud interpretativa va desde el trazado eléctrico, por inducción mental, hacia la víscera enferma. La ventaja del método experimental radica en que se “dirige” la alteración visceral y sobre lo que en ella pasa se confronta con el trazado eléctrico. Camino inverso del que normalmente se sigue en la clínica en lo que al diagnóstico de alteraciones vasculares cardiaca se refiere. Todos estos hechos nos indujeron a plantearnos el problema objeto de esta Tesis relacionando los resultados ya conocidos y que sirvieron de Tesis Doctoral a Morato Crucells, en la cual se estudiaban las variaciones que en electrocardiograma producen la presencia de los iones alcalinos monovalentes cuando con ellos se deriva desde la superficie sana de epicardio. La aplicación de una misma metódica de trabajo, pero actuando no sobre un corazón sano, sino con infarto experimental podía alumbrar algunos de los problemas que se resolvían en dicho trabajo y que aplicados al corazón infartado podían orientar hacia nuevos caminos. En efecto en aquel trabajo se hacia señalar como rasgo muy llamativo la presencia de trazados electrocardiográficos con espacio ST típicos de sufrimiento o necrosis de corazón, sin que hubiese ninguna lesión anatomopatológica en la víscera objeto de experiencia, contrastando con un hecho ya conocido por nosotros, de que derivando desde la superficie sana de un corazón con infarto no se obtenía ningún trazado que denunciase la presencia de dicha lesión. Estos dos hechos contrapuestos constituían motivo de curiosidad e inquietud que nos indujo a estudiar experimentalmente las razones que pudieran aclarar algunos aspectos que derivan de esta significativa paradoja.Tesis Doctoral Relaciones entre el núcleo amigdalino y el hipocampo en el gato, determinadas por medio de post-descargas(1972-01-04) Delgado García, José María; Mir Jordano, Diego; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaA lo largo de nuestro siglo, los conocimientos sobre la fisiología del sistema nervioso se han incrementado extraordinariamente. La aparición y el progresivo desarrollo de las técnicas electrofisiológicas, así como el perfeccionamiento de los métodos estereotáxiso han hecho posible tales avances. Dentro del sistema nervioso central, diversas escuelas han orientado sus estudios hacia parcelas muy concretas del mismo. En especial, la escuela de Yale, representada por Fulton, MacLean, Delgado, Kaada, Klüver y Pribram, se ha ocupado del estudio del sistema límbico. Tales estudios se han orientado bien hacia el análisis de su papel regulador del comportamiento emocional o bien hacia su posible participación en la génesis de la epilepsia psicomotora. Otro núcleo de estudios se ha centrado sobre las interrelaciones funcionales de las distintas estructuras que forman el sistema límbico, siendo quizás este último aspecto el que se muestra más confuso en la literatura actual. Ya dentro del sistema límbico, son el núcleo amigdalino y el hipocampo las estructuras a las que se ha prestado mayor atención (Magnus y Naquet, 1961). Por otra parte, y como señala Jasper (1961), las post-descargas (PDs en adelante) de corta duración y relativamente localizadas, pueden ser utilizadas como medio para estudiar las conexiones funcionales entre distintas áreas cerebrales. El propósito de nuestra investigación ha sido el siguiente: a) Determinar los umbrales de estimulación necesarios para la obtención de PDs en el núcleo amigdalino y en el hipocampo. b) Analizar las características de las PDs obtenidas. c) Registrar las respuestas motoras y vegetativas provocadas por la estimulación del núcleo amigdalino y del hipocampo. d) Utilizar los resultados obtenidos como medio de análisis de las relaciones funcionales entre ambas estructuras. También se ha realizado un estudio introductorio sobre la anatomía y fisiología del sistema límbico, haciéndose especial referencia a las estructuras objeto de nuestro estudio. CONCLUSIONES 1. En la presente investigación se han utilizado las PDs como medio de análisis de las relaciones funcionales entre el núcleo amigdalino y el hipocampo. Para ello se ha puesto a punto la metodología a seguir. 2. Se señala la necesidad de dejar suficiente intervalo de tiempo entre estimulaciones sucesivas para obtener respuestas eléctricas cerebrales de características idénticas. Este intervalo se ha fijado entre 5 y 10 minutos. 3. Los umbrales precisos para la obtención de PDs son inferiores en hipocampo que en amígdala. Dentro del núcleo amigdalino, los menores umbrales corresponden al núcleo basal y los más altos al núcleo central. El hipocampo produce PDs en las estructuras contralaterales con menores umbrales que en los núcleos amigdalinos homolaterales; en los núcleos amigdalinos ocurre un hecho opuesto. 4. Se describen como características de los núcleos amigdalinos PDs con frecuencias de 10-12 cps. Las PDs de mayor duración corresponden al núcleo basal, mientras que la duración menor corresponde al núcleo central. En hipocampo, frecuencias de 20-30 cps son características del hipocampo dorsal y posterior, mientras que el hipocampo ventral muestra un ritmo muy constante de 7-8 cps. PDs de hasta 80 segundos de duración se obtienen en el hipocampo ventral, mientras que las PDs de mayor amplitud se obtienen en el hipocampo doral y posterior. 5. Se presentan los modelos de PDs correspondientes a cada estructura estudiada, así como los modelos que en cada una de ellas produjo la estimulación de las restantes. Con arreglo a sus características las PDs se clasifican en propagadas cuando reproducen el modelo típico de la estructura estimulada y provocadas cuando reproducen el modelo de la estructura en que se realizó el registro. 6. Se describe un efecto inhibidor de la estimulación del núcleo central de la amígdala sobre las puntas que espontáneamente aparecen en el registro de hipocampo ventral. 7. Se señala una acción inhibidora de la producción y propagación de PDs de el núcleo central de la amígdala, mientras el núcleo basal tiene un papel facilitador. En conjunto, la amígdala inhibe la propagación de las PDs producidas en el hipocampo dorsal y posterior. 8. La actividad en brotes que se registra en los núcleos amigdalinos está en relación con la respiración y es activada por los estímulos olfatorios y por la estimulación eléctrica de los núcleos central y lateral de la amígdala. Dicha estimulación aumenta la amplitud y frecuencia de los brotes, pudiendo propagarse al hipocampo ventral. Los estímulos olfatorios provocan la aparición de estos brotes en el hipocampo dorsal y posterior, por lo cual existen relaciones funcionales entre las estructuras olfatorias y los núcleos amigdalinos y el hipocampo. 9. La estimulación del núcleo amigdalino provoca en un 90% de los casos la aparición de respuestas motoras y vegetativas; la estimulación del hipocampo produce estas respuestas en menor grado. 10. Las estimulaciones con intensidades de valor supra-umbral aumenta la frecuencia, duración y amplitud de las PDs sobre todo en el núcleo lateral de la amígdala y en el hipocampo doral y posterior. Las PDs que sufren menos modificaciones son las obtenidas en el núcleo central de la amígdala. 11. Los resultados obtenidos muestran que la anestesia barbitúrica, en contra de lo afirmado por otros autores, no repercute ni sobre los umbrales ni sobre la propagación de PDs dentro del sistema límbico.Tesis Doctoral Implantación de islotes de Langerhans en el hígado de la rata(1976-09-01) Bataller Ferrándiz, Miguel; Goberna Ortiz, Raimundo; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaOBJETO Desde que Banting y Best en 1921 descubrieron la insulina se dio un gran paso en el tratamiento de la diabetes por deficiencia insulinica. Dado que la insulina es una proteína, por vía oral se degrada por los enzimas proteolíticos, perdiendo totalmente su actividad, siendo necesario que el tratamiento de los diabéticos (dependientes de la insulina) sea la inyección diaria de la hormona. Las sulfonil-ureas no solucionan el problema, ya que estas hormonas movilizan únicamente la insulina endógena. El páncreas endocrino segrega la insulina necesaria estimulado por la concentración de glucosa circulante. En el tratamiento actual con insulinas administradas por vía parenteral, la absorción de la misma es constante con independencia de la concentración de glucosa. Es por lo tanto una terapéutica, a todas luces imperfecta que se aleja de la fisiología normal de la célula beta de los islotes de Langerhans. ¿Cómo solucionar el problema?. Dos son las soluciones hipotéticas que se plantean actualmente. a) Trasplantes del páncreas o de los islotes de Langerhans. b) Páncreas artificial (descripción en la revisión histórica de este trabajo). Nosotros hemos planteado el problema del trasplante con la posibilidad de poder implantar islotes aislados en otro órgano, por ejemplo el hígado. CONCLUSIONES 1. La incubación a 37,5º C de un homogenizado de páncreas en presencia de colagensa hace posible el aislamiento de islotes de Langerhans. 2. Los islotes de Langerhans aislados con colagenasa son funcionantes, dado que su incubación y perifusión “in vitro” responden con elevados niveles de secreción insulínica frente a una glucosa elevada en el medio. 3. Los islotes aislados pueden permanecer intactos y con todas sus propiedades fisiológicas durante una semana a 4º C en medio glucosado con penicilina. 4. La extirpación quirúrgica del páncreas provoca la aparición de una diabetes como modelo experimental de la segunda parte de este trabajo. 5. Con el fin de conseguir una localización particular de los islotes de Langerhans en el hígado, realizamos hepatectomias parciales previas a la implantación de islotes por vía portal. La hepatectomía parcial no modifica la glucemia. 6. La introducción en vena porta de una solución de suero fisiológico, conteniendo entre 500 y 800 islotes consiguió la implantación de estos en el hígado. 7. Doce días después de la implantación de islotes por vía portal se realizan cortes sistemáticos del hígado, demostrándose la presencia de los mismos en el parénquima hepático. 8. La sobrecarga intravenosa de glucosa realizada en nuestro modelo experimental (ratas homozigoticas pancreatectomizadas y con islotes implantados en el hígado 12 días antes) provocó la secreción de insulina a unos niveles algo inferiores a los normales, pero muy superiores a los de las ratas pancreatectomizadas simplemente. (La diferencia es estadísticamente muy significativa).Tesis Doctoral Valoración de un sistema automatizado de flujo continuo en bioquímica clínica(1978-09-14) Mateo Cañas, Joaquín; Goberna Ortiz, Raimundo; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaEl objetivo de la presente tesis ha sido exponer de forma critica y sistematizada la experiencia acumulada durante tres años en el uso de sistemas automatizados de flujo continuo en bioquimica clinica para conocer sus ventajas reducir inconvenientes y tratar de ampliar el campo de sus aplicaciones en el futuro. Eliminar la rutina reducir el tiempo y costo de las determinaciones son tres ventajas evidentes de los sistemas automatizados que junto con el incremento de determinaciones que la clinica actual precisa han hecho casi obligatorio el uso de estos sistemas en los servicios centralizados de analisis clinicos. El estudio realizado en la presente tesis de los sistemas de flujo continuo demuestra su alta fiabilidad reproductibilidad y sensibilidad. Para obviar posibles errores metodologicos el autor ha estudiado diversos sistemas de control en los pasos mas importantes del procesamiento de las muestras hasta su valoracion final seleccionando el mas adecuado. En el futuro se prevee su aplicacion para radioinmunoensayo y los controles en continuo de pacientes en estado critico.Tesis Doctoral Cinética de la secreción de insulina durante el ayuno(1978-12-21) Arilla Ferreiro, Eduardo; Goberna Ortiz, Raimundo; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaEl páncreas es una glándula que tiene una doble función: exocrina y endocrina. La secreción exocrina o externa se denomina jugo pancreático. La endocrina, a cargo de los islotes de Langerhans, segrega hormonas, que pasan directamente a la sangre. Al microscopio óptico, los islotes de Langerhans aparecen como acúmulos celulares con varios tipos de células: las células beta que segregan insulina, las células alfa que segregan el glucagón y otros tipos celulares que son los responsables de la secreción de gastrina, somatoestatina y otras hormonas. Las células alfa suelen aparecer en la periferia del islote y las células beta hacia el centro. Al microscopio electrónico, en la célula beta se destacan unos gránulos densos dentro de unas vesículas. Estos gránulos se denominan beta y contienen insulina y proinsulina. El aislamiento de la hipotética hormona pancreática fue laborioso y tardío. Su descubrimiento se debió a dos cirujanos canadienses, Banting y Best, en 1921, y se aplicó inmediatamente en clínica con resultados espectaculares. Es interesante conocer la causa por la que se tardó más de 20 años en la extracción de la insulina. La dificultad consistía en la purificación a partir de tejido pancreático. El páncreas es, en un 98 por ciento, exocrino: tiene por función segregar jugo pancreático compuesto de agua, bicarbonato y enzimas necesarias para la digestión de lípidos, proteínas y carbohidratos. Ahora bien, en la extracción, se provoca involuntariamente la activación de tripsina y quimotripsina, que son enzimas proteolíticos, es decir, degradantes de la insulina al tratarse de una hormona proteica. La rotura de las cadenas peptídicas de la insulina acaba con la funcionalidad o actividad biológica de la misma. La solución de este problema la encontraron varios grupos a la vez en lugares distintos (Rumania, Grecia, Canadá, etc.), pero la más conocida es la experiencia de Banting y Best. Ambos investigadores operaron a un perro y le ligaron los conductos excretores pancreáticos, provocando de esta suerte la atrofia del páncreas exocrino en unas pocas semanas. El páncreas procedente de este animal era pobre en enzimas proteolíticos; efectivamente, un homogenizado del mismo podía bajar la glucemia en el perro diabético. En los años siguientes, se logró purificar la insulina, conocer sus características fisicoquímicas, sus propiedades y, por último, el mecanismo de su síntesis. En 1955, Sanger dilucidó la estructura de la insulina bovina y, en 1963, investigadores norteamericanos, chinos y alemanes, simultánea e independientemente, lograron la síntesis de dicha hormona. La insulina es una proteína pequeña, de peso molecular 5.900. Se compone de dos cadenas, A y B, unidas por dos puentes disulfuro. Existe también un puente disulfuro intracatenario en la cadena A. En su configuración forma hexámeros con cationes de cinc (Zn++), agrupándose varias moléculas. En 1970, Steiner y colaboradores, de la Universidad de Chicago, aislaron un precursor de la insulina, al que denominaron proinsulina. El peso molecular de la proinsulina es de 9.000, aproximadamente, y tiene muy poca actividad biológica. En presencia de enzimas proteolíticos como la tripsina se rompe la cadena de proinsulina, liberando el péptido de conexión (C), transformándose en la insulina. (Goberna, 1978). OBJETIVOS En el momento actual desconocemos si es la glucosa misma o algunos de sus metabolitos el disparador que pone en marcha el mecanismo de secreción de la insulina. La célula beta es capaz de responder, a concentraciones crecientes de glucosa aumentando la secreción. La dificultad de conocer el mecanismo de secreción se basa en el hecho de que la glucosa además de ser la señal que pone en marcha el mecanismo, es metabolizada en la célula beta. Hay evidencias que orientan a considerar el metabolismo de la glucosa como el desencadenante de la secreción. Otras en cambio hacen pensar en la existencia de un glucorreceptor o glucosensor que al unirse a la glucosa dispararía el mecanismo de secreción. Este glucosensor determinaría la afinidad de la glucosa con el mecanismo responsable de la secreción de insulina. La afinidad glucosa-receptor o glucosa transportador, podría modificarse en algunas circunstancias, tales como el ayuno. El ayuno resulta un modelo experimental de gran interés, porque bloquea el mecanismo antes citado de secreción de la célula beta. Valiéndose del modelo experimental que supone el ayuno y utilizando técnicas experimentales como el páncreas aislado y perfundido de rata, el objetivo de este trabajo es el estudio del mecanismo de secreción de la célula beta desde un punto de vista bioquímico. CONCLUSIONES 1. En páncreas aislado y perfundido la secreción de insulina muestra una cinética sigmoide dependiente de la glucosa extracelular en concentraciones comprendidas entre 2,75 y 33,4 mM. 2. El ayuno provoca un bloqueo de la secreción de insulina por inactivación de la célula beta. En el trabajo se muestra como la glucosa, arginina y beta-OH-butirato a diferentes concentraciones son incapaces de estimular la secreción en periodos de ayuno de 4 y 8 días. 3. El ayuno provoca una pérdida del sigmoide característico y la linearización de la secreción. 4. La realimentación con dieta standard durante cuarenta y ocho horas en animales sometidos a cuatro días de ayuno, desbloquea parcialmente la secreción de insulina que vuelve a la normalidad, apareciendo la cinética sigmoidal. 5. La utilización de teofilina 5 mM (metilxantina) en páncreas procedentes de animales ayunados, desbloque también la secreción de insulina, y reaparece la cinética sigmoidal. Los mismos resultados se obtienen con dibutiril-AMPc 2 mM. 6. Al aumentar las concentraciones de Ca++ en el medio de perfusión (de 3,5 a 7,5 mM) de los páncreas procedentes de las ratas ayunadas, aumenta significativamente la secreción de insulina, pero la cinética continúa siendo lineal. 7. La arginina aumenta la secreción de insulina, inducida por glucosa, siendo la cinética de secreción lineal. Realizadas las mismas experiencias en el ayuno, la cinética de secreción continúa siendo lineal. 8. Nuestros resultados indican que el beta-OH-butirato, en presencia de glucosa, representa un estímulo de la célula beta, produciendo un aumento inmediato de la secreción de insulina. En el ayuno, hay una pérdida progresiva de la sensibilidad de la célula beta frente al beta-OH-butirato. 9. Estos hallazgos nos hacen postular la hipótesis de que en el ayuno se pierde alguno de los mecanismos de secreción. No sabemos todavía si se trata de un transportador de la glucosa, un enzima alostérico de las primeras etapas de la glicolisis como la hesoquinasa, glucoquinasa o fosfofructoquinasa, o un hipotético glucosensor. Los trabajos en la Cátedra de Bioquímica se orientan en este momento para aclarar estas incógnitas.Tesis Doctoral Aspectos reguladores de los glucocorticoides sobre la producción de inmunoglobulinas en cultivos de linfocitos humanos estimulados con PWM(1981-06-01) Brieva Romero, José Antonio; Gómez de la Concha, Emilio; Goberna Ortiz, Raimundo; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaSe pretende en el presente trabajo, abordar el análisis de los efectos de los glucocorticoides a dosis alcanzables in vivo, sobre los mecanismos de interacción celular que se generan en el sistema de producción de inmunoglobulinas en cultivos de linfocitos humanos estimulados con PWM. Para ello se estudia la función de poblaciones linfocitarias totales y mezclas de subpoblaciones enriquecidas en linfocitos B y T, de sangre y amígdala. La adición de glucocorticoides (hidrocortisona y prednisolona) a cultivos de linfocitos sanguíneos conduce a una inhibición de la síntesis de DNA estimulada por mitógenos (PHA, Con A, PWM), inhibición que es mayor a mayores dosis, y no depende de efectos citotóxicos. Por el contrario estos fármacos provocan un aumento de la producción de inmunoglobulinas en cultivos de linfocitos sanguíneos estimulados con PWM. Este aumento es más expresivo a dosis farmacológicas (10-5 M, 10-6 M) de estos agentes, y se ejerce sobre las tres clases principales de inmunoglobulinas (IgM, IgG, IgA), si bien es más significativo para la IgM. Este efecto se debe a la generación en el cultivo adicionado con el fármaco, de un mayor número de células sintetizadoras (células plasmacitoides) de inmunoglobulinas. Para que el efecto se produzca, es necesaria la incorporación del agente al cultivo al inicio del mismo, y el efecto no se acompaña de cambios en la cinética de la respuesta al PWM. Este efecto no se ejerce sobre poblaciones enriquecidas en linfocitos B. estos hechos sugieren que el efecto de los glucocorticoides se ejerce sobre los eventos iniciales de la respuesta al PWM. Este efecto de aumento no se observa en poblaciones de linfocitos de amígdala. Estos órganos poseen marcadas diferencias en las proporciones que contienen de las diversas subpoblaciones. Esto lleva a estudiar los efectos de estos fármacos en mezclas de subpoblaciones B y T. Con estos experimentos se comprueba que en relaciones B/T mayores de 1, los glucocorticoides dan lugar a un descenso de la producción de inmunoglobulinas, y en aquellos con una relación B/T menor de 1, actúan aumentando dicha producción. Esto ocurre tanto con linfocitos de sangre como de amígdala. El efecto de aumento en cultivos con una relación B/T menor de 1 puede explicarse por una acción inhibidora de los glucocorticoides sobre la producción T supresora, dado el parecido de este efecto con el generado por linfocitos T irradiados, y por la reversión parcial de la actividad supresora de los linfocitos T pretratados con Con A. El efecto de disminución de la producción de inmunoglobulinas en cultivos con relación B/T mayor de 1, se debe a la acción supresora de una población de monocitos, ya que el efecto desaparece al deplecionar dicha población, hecho este que no conduce a cambios en el fenómeno observado en cultivos con relaciones B/T menores de 1. Todo esto sugiere un papel modulador para los glucocorticoides a dosis farmacológicas, que actuarían aumentando o disminuyendo la producción de anticuerpos, dependiendo de las proporciones que, de las distintas células que intervienen en la respuesta, existan en el cultivo. Esto puede explicar algunos de los efectos que producen los glucocorticoides in vivo. OBJETIVOS Se pretende en el presente trabajo ahondar en el conocimiento de los efectos que los glucocorticoides ejercen sobre la función de los linfocitos. La oportunidad de este estudio reside en el extenso uso que de estos fármacos se está haciendo en la actualidad, fundamentalmente en aquellas afecciones cuya fisiopatología se basa en trastornos de la respuesta inmune. Para ello se requieren ver los efectos causados por estos agentes, cuando son incorporados a dosis fisiológicas o farmacológicas, en sistemas de cultivo in vitro de linfocitos humanos, en los que pueden detectarse las funciones linfocitarias. Resumidamente se cubrirán los siguientes aspectos: 1. Se estudiará el efecto de los glucocorticoides (hidrocortisona y prednisolona) sobre la capacidad de proliferación de linfocitos sanguíneos en cultivo, estimulados con mitógenos (PHA, Con A, PWM), mediante la medida de la captación de timidina tritiada por las células en división. 2. Se observará la acción de las mismas sustancias sobre la producción de inmunoglobulinas por cultivos de linfocitos estimulados con PWM, midiendo la respuesta mediante un RIA. 3. Se analizará la cinética y requisitos de los efectos encontrados. 4. Se compararán los efectos producidos por los glucocorticoides sobre la producción de inmunoglobulinas de poblaciones totales de linfocitos de sangre y amígdala. 5. Se verán estos efectos sobre poblaciones enriquecidas en linfocitos B y linfocitos T, así como en diferentes mezclas de estas poblaciones provenientes tanto de sangre como de amígdala. 6. Se relacionarán los efectos hallados con los producidos por las poblaciones reguladoras de linfocitos T irradiados o pretratados con Con A. 7. Se evaluará la modulación que sobre las actividades encontradas efectúen los monocitos, usando poblaciones deplecionadas de estas células por técnicas de adherencia. Con todo esto se pretende abordar la actuación de los glucocorticoides a dosis alcanzables in vivo, sobre los mecanismos de interacción celular puestos en juego en la producción de inmunoglobulinas estimuladas por PWM, sistema este para el que han descrito gran cantidad de similitudes con los eventos que ocurren en la respuesta inmune normal. CONCLUSIONES 1. La hidrocortisona y prednisolona tienen un efecto inhibidor sobre la proliferación de linfocitos estimulados por mitógenos. Este efecto no se debe a citotoxicidad y es dosis-dependiente. 2. Estos mismos glucocorticoides provocan un aumento de la producción de inmunoglobulinas de linfocitos sanguíneos estimulados con PWM. Este efecto es más significativo a 10-5 M a 10-6 M (dosis farmacológicas), y se observa para las tres clases principales de inmunoglobulinas, si bien es más expresivo para la IgM. 3. El efecto se debe a un aumento del número de células sintetizadoras de inmunoglobulinas. 4. Para producir dicho efecto se requiere que la hidrocortisona sea incorporada al inicio del cultivo. 5. Los glucocorticoides no producen cambios en la cinética de producción de inmunoglobulinas inducida por el PWM. 6. El efecto no se debe a un aporte por parte de los glucocorticoides de señales cooperadoras a poblaciones de linfocitos B. 7. No se observan efectos significativos de estos agentes sobre poblaciones de linfocitos totales de amígdala, en contraste de lo ocurrido en sangre. Esto sugiere un posible papel diferencial de los glucocorticoides en diversos territorios linfoides. 8. Los glucocorticoides a dosis farmacológicas ejercen una acción de disminución de la producción de inmunoglobulinas en cultivos de mezclas de poblaciones enriquecidas en linfocitos B y T, que guardan una relación B/T mayor de uno. Este efecto se debe a la acción supresora de una población de monocitos tras el contacto con glucocorticoides y desaparece al deplecionar estas células. 9. Estos fármacos a las mismas dosis aumentan la producción de inmunoglobulinas en cultivos con una relación B/T menor que uno. Este efecto parece depender de la inhibición de la actividad de los linfocitos T supresores ejercida por los glucocorticoides, dado su parecido con la acción de linfocitos T irradiados, y la reversión parcial de la actividad de los linfocitos T tratados con Con A. 10. Estos hechos sugieren un papel modulador de estos agentes a dosis farmacológicas, que quizás pueda explicar algunos de los efectos de estos fármacos en diversos estados patológicos.Tesis Doctoral Acoplamiento estímulo-secreción en los islotes de Langerhans. Papel de las enzimas fosforilantes de la glucosa(1982-02-01) Bedoya Bergua, Francisco Javier; Goberna Ortiz, Raimundo; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaUna vez revisados los conocimientos actuales sobre los mecanismos de secreción de insulina por la célula B, el objetivo del presente trabajo es: a) El estudio a nivel molecular del sistema de reconocimiento de la glucosa por la célula B, y b) si existen variaciones en su sensibilidad en situaciones experimentales en la que la respuesta insulínica a la glucosa esté alterada. El ayuno es un eficaz modelo experimental que se caracteriza por un bloqueo en la respuesta secretoria de la célula B a la glucosa sin que modifique el contenido de insulina. Por tanto, puede existir un fallo en el sistema receptor de la señal o en el sistema acoplador estímulo-secreción. Por otra parte, es interesante caracterizar con más precisión la enzima fosforilante de elevada Km para la glucosa. La única enzima descrita en tejidos animales con elevada Km para la glucosa es la glucoquinasa hepática. Esta enzima presenta propiedades importantes como desaparición de su actividad en el ayuno e inducción de su síntesis en la realimentación. Es pues de interés estudiar el comportamiento de la enzima descrita en el islote en similares situaciones experimentales. Otra característica del ayuno es la marcada utilización de los ácidos grasos por los tejidos como principal aporte energético. En alguno de ellos, concretamente en músculo esquelético y de corazón, se ha descrito un efecto inhibidor de los ácidos grasos sobre la utilización de la glucosa. La hipótesis más aceptada sugiere que algún metabolito común a la oxidación de los ácidos grasos y a la glucolisis actuaría inhibiendo esta última en pasos limitantes de su velocidad. El primero de ellos en la mayoría de los tejidos es la fosforilación de la glucosa. Por tanto es de interés estudiar la existencia de dicho ciclo en la célula B y si las enzimas que controlan la primera reacción limitante de la utilización de la glucosa están afectadas o no. Para ello se utilizará un análogo estructural del ácido esteárico, el 2 bromostearato que bloquea la beta oxidación de los ácidos grasos, actuando a nivel de la carnitina transferasa de grupos ácidos mitocondrial. El estudio se llevará a cabo a tres niveles: organismo entero, tejido y nivel intracelular, analizando a dichos niveles las modificaciones inducidas experimentalmente. CONCLUSIONES: 1. El ayuno produce un descenso en la glucemia, llegando a un mínimo tras 48 horas y manteniéndose tras periodos más prolongados de ayuno. 2. Diferentes tipos de realimentación recuperan de una manera característica los niveles circulantes de glucosa descendidas durante el ayuno: mientras que la realimentación con dieta standard o selectiva con glucosa recupera la glucemia a las 48 horas de realimentación, la dieta baja en carbohidratos produce una menor recuperación. 3. Los valores basales de insulina plasmáttica descienden en un 63% tras 48 horas de ayuno; dichos valores son similares tras 96 horas de ayuno. La respuesta insulinosecretora de los islotes de Langerhans a la glucosa desaparece parcialmente tras 96 horas de ayuno. 4. Los islotes de Langerhans poseen un sistema enzimático doble que regula la actividad fosforilante de glucosa: uno con alta Km y baja afinidad para la glucosa y otro con baja Km y alta afinidad para la glucosa. 5. La enzima de alta afinidad presenta características cinéticas similares a las descritas para las hexoquinasas de otros tejidos. La enzima de baja afinidad presenta algunas características cinéticas similares a la glucoquinasa hepática. 6. Existe un progresivo descenso de las actividades fosforilantes de glucosa durante el ayuno. Tras 96 horas de ayuno, la actividad de alta Km desaparece prácticamente, mientras que la de baja Km conserva el 23% de actividad residual. 7. La realimentación provoca una paulatina recuperación de ambas actividades, presentando un patrón de reactivación específico para cada tipo de realimentación. 8. La realimentación selectiva con glucosa por vía oral “ad libitum” recupera de una forma importante la actividad de baja afinidad, alcanzado los valores de las ratas alimentadas tras 96 horas de realimentación. 9. La realimentación con dieta standard produce una equilibrada recuperación de ambas actividades, alcanzándose un 80% de los valores en ratas alimentadas tras 48 horas de realimentación. 10. La realimentación con dieta baja en carbohidratos produce una recuperación importante en la actividad de alta afinidad o hexoquinasa. Tras 48 horas de realimentación, alcanza un 85% del valor en ratas alimentadas, mientras que la actividad de baja afinidad apenas alcanza el 50% de los valores en ratas alimentadas con dieta habitual. 11. La glucosa ejerce un efecto inductor específico sobre la actividad de baja afinidad. Dicho efecto es patente tras incubación de los islotes procedentes de ratas ayunadas durante 96 horas en un medio que contiene glucosa 16,7 mM durante 60 minutos. 12. El 2 Bromoestearato, inhibidor de la oxidación de los ácidos grasos, ejerce un efecto inductor patente sobre la actividad de baja afinidad en islotes procedentes de ratas ayunadas durante 96 horas. 13. La incubación de islotes procedentes de ratas ayunadas durante 96 horas con glucosa 16,7 mM y 2 Bromoestearato 0,25 mM durante 60 minutos produce una reactivación plena de la actividad fosforilante de glucosa de baja afinidad. La actividad fosforilante de alta afinidad se recupera en un 60%. 14. El 2 Bromoestearato recupera parcialmente la respuesta insulinosecretora a la glucosa bloqueada en el ayuno.Tesis Doctoral Acción del péptido intestinal vasoactivo a través de su receptor sobre la actividad adenilciclasa y proteinquinasa en células mononucleares sanguíneas humanas(1982-08-25) Guerrero Montávez, Juan Miguel; Goberna Ortiz, Raimundo; Prieto Villapún, Juan Carlos; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaEl péptido intestinal vasoactivo (VIP) está considerado como un neurotransmisor de acción local. Es por esto que al VIP que se encuentra circulando libremente por el plasma, no se le ha dado más valor que el de ser un resto que ha “rebosado” del espacio sináptico. Por otro lado, el mecanismo de acción del péptido sólo se ha estudiado en diversas especies animales, siendo muy difícil extender su estudio al hombre debido a la complejidad que representa la obtención del material de trabajo. Con estas ideas básicas, se plantea el objetivo del presente trabajo desde una doble vertiente: 1. Estudiar un modelo celular no inervado capaz de reconocer al péptido y dar de, este modo, una posible explicación fisiológica a la presencia de VIP circulante en plasma. 2. Utilizar, al mismo tiempo, un modelo celular humano y que sea de muy fácil acceso. Para ello se utiliza como modelo células mononucleares de sangre periférica humana. El medio de estudiar el mecanismo de acción del VIP es a través de una batería de experiencias que incluye: a) Estudio del receptor de membrana. b) Activación del sistema adenil ciclasa. c) Activación de proteínas quinasas. CONCLUSIONES 1. La unión del 125I-VIP a células mononucleares de sangre periférica humana depende de la concentración celular, temperatura, tiempo y pH de incubación. En el presente trabajo las condiciones óptimas de incubación se consiguen a 15ºC, pH 7,5 y concentración celular de 1,5 x 106 cel/ml, en las que la degradación del trazador y del receptor se minimizan, consiguiendo una unión estable y duradera. 2. La unión del trazador al receptor es reversible, teniendo lugar la disociación según una cinética de segundo orden, que indica la existencia de las poblaciones de receptores, que tienen respectivamente 20 y 90 min de tiempo de media disociación. 3. El VIP nativo compite con el trazador a concentraciones del mismo orden de las fisiológicas (3 x 10-11M), siendo la constante de disociación global de 0,4 x 10-9 M VIP. La representación de Scatchard permite distinguir dos tipos de receptores: uno de alta afinidad (Kd = 0,14 x 10-9m) y baja capacidad de unión (8 fmol/106 cel) y, otro, de baja afinidad (80 x 10-9M) y mayor capacidad de unión (800 fmol/106 cel). 4. El receptor de VIP es específico para él. De otros péptidos utilizados solo la secretina compite con el trazador, pero con una afinidad 400 veces menor. 5. El VIP también estimula la producción de AMPc en células mononucleares, proporcionalmente a la concentración celular y dependiendo del tiempo, temperatura y pH de incubación. En el presente trabajo las condiciones óptimas se consiguen a una concentración celular de 0,5 x 106 cel/mel, a 15ºC y pH 7,5, en las que se consigue una producción de AMPc estable y duradera, 6. La producción de AMPc depende de la concentración de VIP. Se produce un aumento significativo sobre los niveles basales a concentraciones de VIP tan bajas como 3 x 10-11 M. La activación máxima se produce a 10-9 M de un péptido, y el 50% de activación se consigue a 0,1 x 10-9 M. 7. La producción de AMPc a través del receptor de Vip es específica para este péptido. Solo la secretina podía aumentar la producción de AMPc pero con una potencia 7.000 veces menor. 8. El VIP produce una activación de proteínas quinasas en células mononucleares que depende del tiempo de incubación, obteniéndose una actividad máxima a los 15 min. 9. La activación de proteínas quinasas depende de la concentración del péptido, obteniéndose una activación significativa a concentración tan baja como 3 x 10-11 M. la máxima activación se consigue a 10-9M, y el 50% a 0,06 x 10-9M. 10. En el estudio de las diferentes subpoblaciones celulares presentes en la preparación de mononucleares, solo los enriquecidos en linfocitos B ligaban 125I-VIP y aumentaban la producción de AMPc en presencia del péptido. Las preparaciones enriquecidas en linfocitos T, monocitos y los hematíes eran completamente incapaces de realizar ninguna de las dos posibilidades. 11. En resumen, existe un sistema receptor efector que reconoce concentraciones plasmáticas fisiológicas de VIP en una de las estirpes celulares de la preparación de mononucleares sanguíneas, como son los linfocitos B.Tesis Doctoral Estudio de la interacción del VIP con linfocitos(1985-02-01) Calvo Gutiérrez, Juan Ramón; Goberna Ortiz, Raimundo; Guerrero Montávez, Juan Miguel; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaEl péptido intestinal vasoactivo (VIP) fue aislado en 1970 por SAID y MUTT a partir del intestino delgado de cerdo. Desde esa fecha hasta la actualidad, el VIP ha pasado de ser considerado como una hormona de acción local o paracrina (POLAK, 1974) a ser considerado como un neuromodulador de acción local (GIACHETTI et al., 1977). Es por esto que, al VIO que se encuentra circulando libremente por el plasma, se le ha llegado a considerar como un simple remanente del liberado a nivel local por las terminaciones nerviosas. Por otro lado, los receptores y las acciones del péptido solo han sido estudiadas en diversas especies animales, ya que el estudio en la especie humana muestra, por la obtención del material de trabajo, una gran complejidad. Debido a todo ello, tiene un gran interés el haber caracterizado el sistema receptor-efector para el VIP así como la activación por VIP de proteínas quinasas dependientes de AMPc en células mononucleares sanguíneas humanas (GUERRERO et al., 1981a y 1984), ya que estas células son células libres y no están inervadas. Es importante comentar el hecho de que esta población mononuclear no es una población homogénea, sino que es una mezcla de varios tipos celulares, por lo que, la subpoblación que liga específicamente al péptido, es desconocida. Por todo lo anteriormente expuesto, el objetivo del presente trabajo es triple: 1. Caracterizar la subpoblación celular que, dentro de la población mononuclear total, liga específicamente al VIP. 2. Estudiar el posible papel que juega el VIP en la fisiología de las células mononucleares sanguíneas humanas. Para ello se ha elegido como tema de estudio el efecto del VIP sobre la proliferación linfocitaria, utilizando como modelo experimental el cultivo de linfocitos. 3. Estudiar las modificaciones que sufre el sistema receptor para el VIP en determinadas condiciones fisiopatológicas. Como situación fisiopatológica se ha elegido el ayuno y como modelo experimental células mononucleares sanguíneas de rata. CONCLUSIONES 1. La población de células mononucleares sanguíneas humanas muestra una unión específica para el péptido intestina vasoactivo (VIP). En estas células, la constante de disoaciación global aparente (Kd) tiene un valor de 0,3 nM. La representación de Scatchard permite distinguir dos tipos de receptores: uno de alta afinidad (Kd = 0,11 nM) y baja capacidad de unión (4,6 fmol/106 cel) y, otro, de baja afinidad (Kd = 80 nM) y alta capacidad de unión (800 fmol/106 cel). En estas msimas células, el VIP estimula la producción de AMPc con un valor de Km = 0,09 nM. 2. La subpoblación mononuclear empobrecida en linfocitos T muestra una unión específica de VIP, con u valor de Kd = 2,4 nM. La representación de Scatchard revela la existencia de dos poblaciones de receptores: una de alta afinidad (Kd = 0,20 nM) y baja capacidad de unión (5,0 fmol/106 cel) y, otra, de baja afinidad (Kd = 80 nM) y alta capacidad de unión (590 fmol/106 cel). En esta subpoblación celular, el VIP también incrementa las concentraciones intracelulares de AMPc, con un valor de Km = 0,02 nM. 3. La subpoblación mononuclear empobrecida en monocidos también muestra una unión específica del péptido, con un valor de Kd = 10 nM. El análisis de Scatchard muestra la existencia de dos tipos de receptores: uno de alta afinidad (Kd = 0,16 nM) y baja capacidad de unión (4,0 fmol/106 cel) y, otro, de baja afinidad (Kd = 36 nM) y alta capacidad de unión (450 fmol/106 cel). También en esta subpoblación celular el VIP estimula la producción de AMPc, teniendo la Km un valor de 0,06 nM. 4. La subpoblación celular enriquecida en linfocitos T, con las condiciones experimentales utilizadas, no muestra ninguna unión específica para el VIP, ni revela un aumento en las concentraciones intracelulares de AMPc bajo la acción del VIP. 5. La subpoblación celular enriquecida en monocitos no muestra, con las condiciones experimentales utilizadas, ninguna unión específica para el VIP. Tampoco se ha observado ninguna correlación positiva entre la cantidad de 125I-VIP unido a una oblación mononuclear total y el número de monocitos presente en dicha población, tal y como indica el coeficiente de correlación (r = -0,3376) y el test de la t de Student (p < 0,05). 6. Otros tipos celulares, tal y como hematíes y plaquetas, no muestran con las condiciones experimentales utilizadas ninguna unión específica del VIP. 7. A partir de lo expuesto en los puntos anteriores, se concluye que la subpoblación celular que liga específicamente al VIP es la formada por linfocitos B t células del sistema K-NK. 8. El VIP muestra un efecto estimulador sobre la incorporación de 3H-Timidina en linfocitos humanos. Este efecto es dependiente del tiempo y de la concentración de VIP utilizada. 9. Las células mononucleares sanguíneas de rata muestran una unión específica para el VIP, obteniéndose una Kd = 1 nM. La representación de Scatchard muestra dos tipos de receptores: uno de alta afinidad (Kd = 0,05 nM) y baja capacidad de unión (2,6 fmol/106 cel) y, otro, de baja afinidad (Kd = 142 nM) y alta capacidad de unión (1966 fmol/106 cel). 10. La unión del VIP a estas células es un proceso dependiente del tiempo y es reversible, teniendo lugar la disociación según una cinética de segundo orden, lo cual indicia la existencia de dos poblaciones de receptores que tienen respectivamente 380 y 27 minutos de tiempo de semidisociación. 11. Las células mononucleares sanguíneas de ratas ayunadas muestran una mayor unión para el VIP. Esta unión se incremente conforme aumenta el periodo de ayuno (1,3 y 5 días). 12. Esta mayor unión, tal y como indican los datos estequiométricos (Kd = 0,3 nM) y el análisis de Scatchard (Kd = 0,025 y 83,0 nM y 2,8 y 1730 fmol/106 cel de capacidad de unión para los receptores de alta y baja afinidad respectivamente), es debida a una mayor afinidad del receptor por el péptido y no a un aumento en el número de sitios de unión. 13. El incremento en la afinidad encontrado en el ayuno es debido a una menor velocidad de disociación del complejo hormona-receptor. 14. El aumento de la afinidad encontrado durante el ayuno es revertido con la realimentación.Tesis Doctoral Efecto del etanol sobre los receptores del peptido intestinal vasoactivo y sobre el sistema adenil ciclasa en enterocitos de rata(1986) Jiménez Carrasco, Juan; Goberna Ortiz, Raimundo; Guerrero Montávez, Juan Miguel; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaTesis Doctoral Regulación del metabolismo del glucógeno por ácidos grasos y cuerpos cetónicos en hígado y tejido adiposo(1986-01-02) Domínguez Gutiérrez de Ceballos, Rosa María; Goberna Ortiz, Raimundo; Sobrino Beneyto, Francisco; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaOBJETIVOS: En la técnica general del Ciclo Glucosa ácidos grasos (RANDLE, 1963), se establece una relación inversa entre ambos metabolitos, de tal manera que niveles altos de ácidos grasos (o cuerpos cetónicos) en plasma conlleva a una menor utilización de la glucosa en los tejidos periféricos. También se ha demostrado que una infusión intragástrica de ácidos grasos desencadena una menor degradación de glucógeno hepático en animales sometidos a ejercicio (HOLLOSZY y cols., 1976). Estos datos configuran una situación por la cual se puede hipotetizar una cierta conexión entre ácidos grasos y metabolismo del glucógeno. En base a esto, nuestros objetivos son: 1. Describir el mecanismo molecular en hígado de la interacción de los ácidos grasos con algunos enzimas del metabolismo del glucógeno, tales como la fosforilasa y la sintasa. 2. Intentar explicar en base a las actividades de estos enzimas y los niveles de ciertos metabolitos, como el cAMP y el ATP, la hipotética conexión establecida anteriormente. 3. En la investigación del mecanismo molecular de la inhibición glucogenolítica se estudiará el efecto de hormonas cuyo modo de acción se caracteriza por su dependencia (glucagón) o independencia (adrenalina y vasopresina) del cAMP. 4. La metabolización hepática de los ácidos grasos produce cuerpos cetónicos. Se pretende estudiar el efecto de estas moléculas sobre la glucogenolisis y glucogénesis hepática. 5. el tejido adiposo es el principal productor de ácidos grasos plasmáticos. Se tratará de analizar el efecto que los ácidos grasos ejercen sobre los enzimas del glucógeno en tejido adiposo, tomando a éste como ejemplo de tejido extrahepático susceptible a la regulación hormonal del transporte de glucosa. CONCLUSIONES: 1. La suspensión de hepatocitos aislados, obtenidos mediante la técnica de colagenasa, utilizados para la realización de este trabajo presentaba una viabilidad del 80-90% por el método de exclusión de azul trypan. El funcionalismo celular se verificó por diferentes métodos: a) incorporación de U-14C glucosa al glucógeno (307,5 μmoles glucosa incorporados/g proteína x 40 min), b) por la disminución de fosforilasa a y concomitante aumento de sintasa en presencia de glucosa; y c) por la activación de la fosforilasa a ante diferentes hormonas (glucagón, adrenalina y vasopresina). 2. Como índice glucolítico se ha tomado el valor de la actividad de la fosforilasa a. El ácido palmítico 82,5 mM) provoca tanto una disminución en la actividad máxima glucolítica, como una disminución en la sensibilidad de los hepatocitos para el glucagón. La disminución en la actividad máxima era variable de unos experimentos a otros, y oscilaba entre 1,5-2 veces la actividad observada en hepatocitos controles. Los cambios más significativos ocurrían con respecto a la sensibilidad (Ka para glucagón en ratas controles 10-10 M; Ka en presencia de ácido palm´tico 3-5.10-10 M). 3. La glucogenolisis estimulada por adrenalina o vasopresina también se encuentra disminuida por la presencia de ácidos grasos. Este efecto se ejerce fundamentalmente a nivel de la activación máxima con una disminución de aproximadamente dos veces. En nuestras condiciones experimentales no hemos encontrado variaciones significativas en los valores de Ka para las hormonas. 4. Se concluye de los puntos anteriores 2 y 3 que el efecto delácido palmítico se observa tanto si el mecanismo glucogenolítico requiere o no la presencia de cAMP. 5. El estado de alimentación del animal no afecta a la acción del ácido palmítico sobre la glucogenolisis. El grado de oxigenación posee una relativa importancia, ya que el efecto inhibidor del ácido palmítico es menor. 6. No existen variaciones significativas en los niveles de ATP en presencia de ácido palmítico (0,444 ± 0,14 μmoles/g células con 10-9 M-glucagón, frente a 0,400 ± 0,29 μmoles/g células en presencia de glucagón y 2,5 mM de ácido palmítico. 7. El ácido palmítico no modifica los niveles de cAMP obtenidos en presencia de glucagón y adrenalina. 8. Con el objetivo de estudiar si algún producto del metabolismo de los ácidos grasos son los responsables del efecto observado sobre la glucogenolisis, analizamos la cetogénesis dependiente de hormonas y el efecto de los cuerpos cetónicos sobre la glucogenolisis. La producción de cuerpos cetónicos es dependiente de la concentración de glucagón (actividad máxima: 10-10M), adrenalina (A max: 3.10-5M) y vasopresina (A max: 10-4U/l). Los ácidos grasos estimulan la cetogénesis de 4 a 5 veces respecto a los valores controles. En confirmación con resultados de otros autores, la adrenalina en ratas en ayuno (24 h) no estimula la cetogénesis. 9. Los cuerpos cetónicos (β-hidroxybutirato y acetoacetato) a concentraciones de 2, 4 y 8 mM estimulan la activación fosforilasa a. El máximo valor se alcanza a los 15 min de incubación con acetoacetato 8 mM. Sin embargo el β-hidroxybutirato y el acetoacetato a las concentraciones anteriormente citadas no modifican la actividad glucogenolítica del glucagón. 10. La incorporación de U-14C glucosa a glucógeno, en hepatocitos, no se modifica por la presencia de ácido palmítico (2,5 mM). La máxima incorporación (307 μmoles de glucosa/g células) se obtiene a los 40 min de incubación con 50 mM-glucosa. 11. La adición de acetoacetato (8 mM), a hepatocitos de ratas alimentadas, incubados durante 40 min en medio Na+ con 30 mM glucosa, disminuye significativamente la síntesis de glucógeno (aproximadamente a la mitad). Con β-hidroxibutirato a igual concentración no se modifica. Sin embargo en un medio rico en K+ a las concentraciones estudiadas de 2, 4 y 8 mM de acetotato y β-hidroxibutirato no se observan variaciones significativas. 12. En el tejido adiposo, a diferencia de lo acontecido en hígado, existe una disminución de la síntesis de glucógeno en presencia de ácido palmítico (1, 5 mM y 2,5 mM) a 5mM glucosa. 13. A partir de los resultados presentados, es posible interpretar en términos enzimáticos la disminución que la presencia de ácidos grasos ejerce en el consumo de glucógeno observada por Hollozszy y cols., (19769. Sin embargo, no disponemos de una teoría que pueda explicar el mecanismo molecular de tal inhibición.Tesis Doctoral Evaluación de los inmunocomplejos circulantes en patología humana(1986-04-09) López Elorza, Félix; Goberna Ortiz, Raimundo; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaSe evalúa en el presente trabajo la importancia de los inmunocomplejos circulantes en patología humana. La utilizaron como modelos biológicos varios grupos de enfermos con presentes diagnósticos y en su confirmación posterior se correlacionaron estos con las cifras obtenidas de inmunocomplejos circulantes. Otro grupo de enfermos fue seguido durante varios años observando la correlación existente entre las cifras de inmunocomplejos y la evaluación clínica durante el proceso. Por último se ha evaluado la representación que tienen algunas aptitudes terapéuticas en los valores de inmunocomplejos circulantes. Se concluye enumerando los casos en los cuales es necesario realizar la cuantificación de inmunocomplejos y con qué periodicidad sería aconsejable. En la introducción expuesta anteriormente, se pone de manifiesto que los inmunocomplejos circulantes, son compuestos que tienen un amplio protagonismo dentro de la respuesta inmune y por tanto, en la defensa de la integridad bioquímica del huésped. Cifras alteradas de inmunocomplejos circulantes pueden aparecer como consecuencia de una respuesta normal ante cualquier agresión antigénica. Asimismo, la elevación de los niveles de inmunocomplejos circulantes son un índice significativo en determinados estados patológicos. Por otra parte, concentraciones altas de inmunocomplejos circulantes durante un tiempo prolongado, pueden ser causa por sí misma de enfermedad y ciertos compuestos químicos y biológicos alteran el normal o patológico comportamiento de la respuesta inmune. Por lo tanto, la utilización de este parámetro como prueba complementaria es de gran utilidad en la clínica. Mediante la cuantificación de inmunocomplejos circulantes podemos obtener información adicional sobre las posibilidades defensivas del huésped, seguir la evolución de ciertos procesos patológicos teniendo en cuenta que, la desviación de su normal evolución pueden provocar precozmente la aparición de cuadros más complejos. Por lo anteriormente expuesto, los objetivos del presente trabajo son 1. Conseguir la puesta a punto de una técnica para cuantificación de inmunocomplejos circulantes económica y amortizable que, con resultados similares a otras técnicas muy especializadas, nos permita incluirla entre los parámetros de rutina asistencia en un laboratorio de bioquímica clínica. 2. Evaluar en nuestro medio hospitalario y ambulatorio la importancia clínica de su exploración en patología. 3. Extraer conclusiones de los casos en que esté indicado el seguimiento de los enfermos ya que, los niveles de inmunocomplejos circulantes pueden significar tanto un índice de actividad de la enfermedad como del rendimiento del tratamiento instaurado.Tesis Doctoral Estudio de la función de la célula B del páncreas endocrino en ratas sometidas a diferentes dietas(1986-08) Ramírez Cárdenas, Remedios; Goberna Ortiz, Raimundo; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaTesis Doctoral Contribución al estudio dermatoglífico en las alteraciones cromosómicas sexuales(1988-02-08) Álvarez-Ossorio Vicente, Antonia; Novales Huerta, María de los Ángeles; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaLas primeras patologías asociadas a rasgos dermatoglíficos fueron ciertas cromosomopatías como las trisomías 21, 18 y 13, manteniéndose sus pecualiaridades dermatoglíficas a pesar de las diferencias étnicas y raciales. Los síndromes gonosómicos presentan alteraciones dermatoglíficas menos específicas que los autosómicos, destacando las de carácter cuantitativo. Dado que en la zona de Andalucía Occidental y Extremadura no existía ningún estudio dermatoglífico en individuos con alteraciones gonosómicas, nos pareció interesante realizar una evaluación de las peculiaridades dérmicas de los síndromes Turner, Klinefelter y Triple X en nuestro entorno. Nuestro interés se centró en establecer las diferencias existentes entre estos tres grupos patológicos y la población general, con objeto de conocer las semejanzas y diferencias entre los resultados obtenidos en nuestra área geográfica y los obtenidos por otros investigadores en diferentes comunidades, más que en resaltar la utilidad diagnóstica del análisis dermatoglífico en estos síndromes, ya que dada la alta variabilidad biológica de los caracteres dérmicos, no existe un rasgo único ni un patrón dermatoglífico específico para pacientes individuales. En nuestro estudio partimos de cinco grupos distintos: control masculino, control femenino, Turner, Klinefelter y Triple X; en cada uno de ellos estudiamos las características dérmicas utilizando los diferentes métodos propuestos al objeto de recabar el máximo de información. Seguidamente procedimos a valorar estadísticamente las diferencias existentes, comparando el grupo Klinefelter con el control masculino y los grupos Turner y Triple X con el control femenino, para evitar que el dimorfismo sexual dermatoglífico interfiriera en los resultados. Por otra parte la alta viabilidad de las aneuplidías gonosómicas, que comprenden desde la monosmía X hasta las pentasomías más variadas, ha permitido especular a cerca de la influencia que ejerce el tipo y número de cromosomas sexuales sobre los rasgos dermatoglíficos; estableciéndose la hipótesis de que el aumento del número de cromosomas en el cariotipo está asociado con la disminución de los valores dermatoglíficos cuantitativos y de que el efecto reductor del cromosoma X es mayor que el del Y. Con objeto de contribuir al esclarecimiento de esta hipótesis y de su validez para los caracteres cuantitativos más representativos, nos planteamos, como otro aspecto de este trabajo, el estudio de la variación de los rasgos cuantitativos en función de la variación gonosómica. Para estudiar el efecto del cromosoma X partimos de dos series de muestras, cuya característica diferencial es la presencia o ausencia de cromosoma Y: la serie 45,XO, 46,XX, 47,XXX, 48,XXXX, 49,XXXXX y la serie 46,XY, 47,XXY, 48,XXXY. Mientras que para estudiar el efecto del cromosoma Y utilizamos las series 45,XO, 46,XX y 46,XX, 47,XXY, ya que no disponíamos de varones con polisomías del cromosoma Y. CONCLUSIONES: 1. EL síndrome de Turner es la gonosomopatía detectada con mayor frecuencia en nuestro entorno, en concordancia con los datos de la literatura general. Sin embargo la frecuencia de individuos diagnosticados con síndrome de Klinefelter y polisomía X en nuestra área geográfica es menor de la que cabría esperar, lo que nos hace pensar dadas las características fenotípicas de estos síndromes, en una tasa de detección baja. 2. El presente estudio dermatoglífico es el más exhaustivo de los realizados en individuos con alteraciones de los cromosomas sexuales, lo que nos ha permitido comparar nuestros resultados con los diferentes estudios publicados independientemente de su metodología. 3. Nuestros resultados indican que el método Tradicional y el Topológico ofrecen una información semejante en general, pero más o menos detallada para determinados rasgos, sin que ninguno de ellos presente ventajas claras respecto al otro a excepción de la mayor rapidez y comodidad del criterio topológico, por lo que consideramos ambos métodos no como excluyentes, sino como complementarios. 4. La clasificación de Weninger y Navratil resulta ser más informativa que la clasificación convencional en la determinación del tipo de pliegue anómalo más frecuente en los grupos patológicos. 5. El estudio comparativo de los rasgos dermatoglíficos cualitativos ha revelado que los individuos con dotación cromosómica 45,XO presentan significativamente: a) Más bucles ulnares y menor frecuencia de arcos y vorticilos en los dedos. b) Mayor frecuencia de bucles periféricos, bucles tienda y bucles centrales (III, IIIT, (III) ̂) considerados conjuntamente en el área palmar III. c) Mayor frecuencia de figuras hipotenares (H, H ̂, Hr); en concreto más bucles ulnares (Lu) o periféricos (H) y más vorticilos (W). d) Mayor frecuencia de terminación de la línea A en la base del pulgar. e) Mayor frecuencia de terminación de la Línea T en el área interdigital II. f) Más trirradios axiales en posición t” utilizando los métodos de Penrose y Ford-Walker en el criterio de clasificación Tradicional y el método de Penrose en el Topológico. g) Menos trirradios axiales en posición t según el método de Penrose en el criterio de clasificación Tradicional. h) Más trirradios en el borde ulnar del área hipotenar (tb). i) Menos surcos Normales según la clasificación convencional. j) Menos surcos del tipo II y más del tipo V según la clasificación de Weninger y Navratil. 6. El estudio comparativo de los rasgos dermatoglíficos cuantitativos ha revelado que los individuos con dotación cromosómica 45,XO presentan significativamente: a) Mayor número Dactilar Total (NDT), a pesar de la mayor frecuencia de vorticilos. b) Menor Índice de Líneas Principales (A+D). c) Mayor ángulo atd máximo. d) Mayor distancia porcentual del trirradio axial más distal al pliegue carpal. 7. El estudio comparativo de los rasgos dermatoglíficos cualitativos muestra que los individuos con dotación cromosómica 47,XXY presentan significativamente: a) Menos bucles radiales (Ir) en el área palmar I. b) Menos bucles periféricos (II ó L) en el área interdigital II. c) Menor frecuencia de trirradio accesorio a’. d) Menos trirradios axiales en posición t utilizando el método de Ford-Walker en el criterio de clasificación Tradicional. e) Menos surcos Normales según la clasificación convencional. f) Más pliegues Sidney según la clasificación convencional o del tipo III según la clasificación de Weninger y Navratil. 8. La comparación de los rasgos dermatoglíficos cuantitativos entre el grupo Klinefelter y el control masculino no ha revelado ninguna diferencia significativa. 9. El estudio comparativo de los rasgos dermatoglíficos cualitativos muestra que las mujeres 47,XXX presentan de forma significativa. a) Más arcos y menos bucles ulnares en los dedos. b) Menos pliegues Normales según la clasificación convencional. c) Distinta distribución de surcos según la clasificación de Weninger y Navratil. 10. Respecto a los rasgos cuantitativos, las mujeres con trisomía X presentan un número significativamente menor de crestas entre los trirradios a y b de la palma. 11. Nuestro estudio muestra que el grupo Turner es el que presenta mayor número de diferencias significativas respecto al control, siendo estas diferencias concordantes con las registradas en la literatura. El grupo de Klinefelter y el grupo Triple X muestran menor número de diferencias respecto al control, siendo estas diferencias menos coincidentes en los estudios realizados. 12. El estudio estadístico sobre la variación de los rasgos dermatoglíficos cuantitativos en función de número de cromosomas sexuales, presenta muchas dificultades debido a la baja incidencia de polisomías con más de tres cromosomas sexuales. 13. Nuestro estudio descriptivo sobre la variación de los rasgos dermatoglíficos cuantitativos en función del número de cromosomas sexuales, muestra que el aumento del número de cromosomas X en el cariotipo parece estar asociado con la disminución del Número Dactilar Total (NDT) manifestándose este efecto reductor tanto en la serie de varones como en la de mujeres. 14. El aumento del número de cromosomas X en el cariotipo parece estar asociado, además con cierta tendencia a la disminución del Número de crestas a-b. 15. Por otra parte el efecto reductor del cromosoma X sobre el Número Dactilar Total y el Número de crestas a-b parece ser mayor que el del Y. 16. Por último las alteraciones numéricas de los cromosomas sexuales, parecen estar relacionadas en general con la aparición de ángulos atd más abiertos.Tesis Doctoral Papel regulador de la fructosa-2, 6-difosfato en la glucolisis de diferentes tejidos(1990-03-06) Gualberto García, Antonio; Sobrino Beneyto, Francisco; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaSe ha comprobado el papel regulador de la fructosa-2,6-bifosfato en la glucolisis de diferentes tejidos, dichos tejidos fueron estudiados en circunstancias control y/o sometidos a diferentes estados metabólicos y hormonales. En el tejido adiposo blanco la estalación de la glucolisis por insulina parece estar mediada por la fructosa-2,6-bifosfato. La concentración de este metabolito está además incrementada durante la realimentación que sigue a una fase de ayuno. En el tejido adiposo marrón la fructosa-2,6-bifosfato estimuló la glucolisis durante el periodo de aclimatación al frío. Este efecto fue potenciado por las hormonas tiroideas. En el tejido cardiaco la concentración de fructosa-2,6-bifosfato disminuyó durante el hipotiroidismo experimental. Se observó un descenso de las actividades pfk-1 y pfk-2 que se cree debido a una disminución en la síntesis del enzima. La actividad pfk-1 del corazón hipotiroideo respondió al efecto de sus estimuladores. Se describe la presencia de fructosa-2,6-bifosfato en los hematies de rata. El 2,3-difosfoglicerato resultó ser inhibidor de las actividades pfk-2 y ppi-fgp-1-fosfotransferasa, enzima auxiliar de la medida de fructosa-2,6-bifosfato. En las células de tumor adrenal y-1 la fructosa-2,6-difosfato parece mediar la estalación de la glucolisis por efecto de la acth.Tesis Doctoral Producción de anticuerpos monoclonales humanos y su aplicación en el estudio del poliformismo del sistema HLA(1990-11-08) Sánchez Sánchez, Berta; Núñez Roldán, Antonio; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaTesis Doctoral Mecanismo de acción de la ciclosporina A en el páncreas endocrino y células HIT(1991) Martín Bermudo, Francisco Manuel; Bedoya Bergua, Francisco Javier; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaTesis Doctoral Estudio de los cambios producidos durante el envejecimiento en las principales proteinas enzimaticas implicadas en los procesos digestivos(1991-06-27) Mateos-Nevado Alonso, María Dolores; Machado de la Quintana, Alberto; Mateos-Nevado Artero, Benito; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaTesis Doctoral Papel de la pancreastatina en la homeostasis de la glucosa(1991-07-05) Sánchez Margalet, Víctor; Goberna Ortiz, Raimundo; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e InmunologíaLa pancreastatina, un péptido de 49 aminoacidos, fue Aislada del páncreas porcino en diciembre de 1986, se Encuentra distribuida por todo el sistema neuroendocrino Y tiene como posible precursor a la cromogranina a. Se le Ha dado un papel autorregulador de la célula beta, Inhibiendo la secreción de insulina con la que se Cosecreta. En esta tesis se muestra por vez primera el efecto Hiperglucemico y glucogenolitico de la pancreastatina en La rata in vivo e in vitro. In vivo, su acción no estaria Mediada por el glucagon, y menos por las catecolaminas, Cuya secreción parece ser inhibida por la pancreastatina. In vitro, hemos demostrado el efecto glucogenolitico Sobre los hepatocitos aislados de rata, un efecto Dependiente de la dosis y saturable a una concentracion Superior a 10 -7, con una ed50 de 1 nm, y un efecto Máximo aproximadamente del 55% del producido por el Glucagon y del 75% del producido por la vasopresina. Su acción no está mediada por el sistema efector de la Adenilato ciclasa, ya que no modifica la producción de Ampc. Sin embargo su efecto sobre los hepatocitos es Dependiente del calcio. Además hemos mostrado que la Pancreastatina estimula la actividad proteína quinasa c De los hepatocitos, por lo cual, todo hace pensar que la Pancreastatina actuaria a través de un receptor acoplado A la fosfolipasa c de membrana. El fragmento de 17 aminoacidos del extremo c-terminal de La pancreastatina (del 33 al 49), resulta tener una mayor Actividad biológica tanto in vivo como in vitro, con Respecto al efecto de la pancreastatina sobre los Hepatocitos. Así, la pancreastatina o su fragmento activo Se comportarían como hormonas que tienen su efecto lejos Del órgano endocrino que las produce. Pero la pancreastatina no se encuentra sólo en los gránulos beta. Como hemos visto anteriormente, es un péptido que parece distribuirse por todo el sistema neuroendocrino, aunque sea en forma de su precursor, la cromogranina A. La aportación del sistema cromafín en los niveles circulantes de pancreastatina, podría ser suficiente para producir este efecto glucogenolítico sinérgico al producido por las catecolaminas. Hemos podido constatar también la mayor actividad biológica del péptido de 17 aminoácidos, correspondientes al extremo C-terminal de la pancrastatina (del 33 al 499, como ya se había descrito para su acción sobre el páncreas endocrino. Nuestros resultados apoyan la idea de una hormona de 17 aminoácidos, con un proceso de síntesis que se iniciaría en la formación decromogranina A como prehormona, y que tendría como paso intermedio, la pancreastatina de 49 aminoácidos. Los trabajos in vitro confirmaron el papel glucogenolítico de la pancreastatina. El hecho de que la pancreastatina fuera activa a una concentración del orden nanomolar, está a favor de un papel fisiológico de esta nueva hormona sobre el hígado. También pudimos comprobar in vitro la mayor actividad biológica del fragmento 33-49 C-terminal de pancreastatina. Los estudios sobre el mecanismo de acción e la pancreastatina sobre el hepatocito han dado como resultado el encuadre de la pancreastatina dentro del grupo de hormonas cuya acción está medida por el Ca2+ y la proteína quinasa C, por lo que es de esperar que la pancreastatina active la fosfolipasa C de la membrana plasmáticas, que sería la responsable del incremento de los dos mediadores, el Ca2+ por el IP3, y la PKC por el diacil-glicerol. Así, pues, la pancreastatina parece actuar sobre el hígado del mismo modo que la vasopresina, con la cual hicimos los estudios comparativos in vitro, alcanzando la pancreastatina un 70-80% de la actividad de la vasopresina. Sin embargo, queda por resolver si la acción de la pancreastatina está vehiculada por su interacción con receptores V1 de vasopresina, con la que comparte los dos últimos aminoácidos del extremo C-terminal, que si bien no es mucho, es donde radica la actividad biológica de ambas hormonas. Ya hemos comentado el problema del marcaje radiactivo de la pancreastatina, por no tener restos de tirosina. Hasta la fecha, no ha aparecido ningún trabajo describiendo la caracterización de un receptor para pancreastatina. El coste elevado de la pancreastatina tirosilada puede ser una causa, aunque quizá la manipulación de su estructura modifique su configuración y/o su capacidad de unión al receptor putativo de la pancreastatina. Lo que está claro es que si la pancreastatina juega un papel en la homoeostasis de la glucosa, es a través de un receptor, tanto en la célula beta como en el hepatocito. La glucosa constituye la moneda de transacción energética intercelular por excelencia. Por esta razón, existe una extraordinaria estabilidad de la glucemia aún en las condiciones más extremas, tales como el ayuno o el ejercicio. Para mantener constante la concentración de glucosa en sangre, los seres superiores disponen de mecanismos extremadamente sofisticados. Entre éstos destaca el sistema hormonal del islote de Langerhans. La simpleza del par insluina-glucagón a dejado paso a un complejo sistema multiendocrino cuya complejidad se justifica por la importancia del mantenimiento de los niveles de glucemia. El caso más claro de desajuste de este sistema es la diabetes mellitus no insulín dependiente, que además es el de mayor prevalencia. Se conocen bien, aunque no del todo, las consecuencias nefastas de una hiperglucemia mantenida, no sólo en el sistema cardiovascular, sino en la misma célula beta (Unger y Grundy 1985). Hace relativamente poco tiempo apareció en la escena de la DMNID un nuevo péptido que como la pancreastatina es sintetizado en el gránulo beta (Lukinius et al 1989), se trata de la amilina (westermark 1989). Hoy en día es el marcador anatomo-químico más consistente de la DMNID. En el año 1988 se describió por vez primera el efecto insulín-resistente in vitro de dos péptidos de la misma familia, la amilina y el péptido relacionado con el gen de la calcitonina (Leighton y Cooper). Poco después de describía este efecto in vivo (Sowa et al 1990). Nuestro trabajo ha contribuido en la inclusión de la pancreastatina en la escena de la DMNID y los problemas de insulín resistencia, al encontrar en este péptido un posible papel contrarregulador de la insulina, tanto en su secreción como en su acción a nivel hepático. El papel fisiológico de la pancreastatina, discutido en nuestros resultados, permanece aún por esclarecerse, pero ya ha aparecido un trabajo en el que se describen niveles elevados de pancreastatina en la DMNID tras una sobrecarga intravenosa de glucos (Funakoshi et al 1990). En este trabajo, los pacientes que tenían elevada la pancreastatina plasmática estaban tomando sulfonil-ureas, con lo que las conclusiones son más difíciles de obtener. Sin embargo, la pancreastatina tendrá sin duda mucho que decir en el amplio síndrome llamado diabetes mellitus no insulín-dependiente. Hay otro síndrome, llamado X o de Reaven, que incluye la presencia de hiperinsulinemia e hipertensión esencial, que hace también posible la inclusión de la pancreastatina como un elemento a estudiar en este tipo de alteraciones en la secreción de insluina. Como hemos visto, la pancreastatina es un modulador tanto de la secreción de insulina como de catecolaminas, que son las hormonas patológicamente elevadas en este grupo de pacientes hipertensos. Teniendo en cuenta que la pancreastatina podría tener un papel en la resistencia a la insulina, se abren dos nuevos campos de investigación de este nuevo péptido. Por un lado, el estudio in vitro de la posible resistencia a la insulina ocasionada por la pancreastatina. Y por otro el estudio del sistema insulina-catecolaminas-pancreastatina en los pacientes con este nuevo síndrome tan frecuente hoy día. Sin duda alguna, la pancrastatina será una hormona que haya que estudiar para comprender mejor estos dos grandes síndromes que tienen como denominador común las alteraciones en la secreción de insulina, como son la diabetes mellitus no insulñin dependiente y el síndrome X o de hiperinsulinismo-hipertensión.Tesis Doctoral Citogenética de las lesiones proliferativas del tiroides humano en cultivo celular(1991-10-08) Salas Herrero, Ernesto; Novales Huerta, María de los Ángeles; Galera Davidson, Hugo; Universidad de Sevilla. Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular e Inmunología